«Queremos abrir, pero para que sirva de algo»

SOCIEDAD

JOSE PARDO

Comercio y hostelería de Ferrol afrontan maniatados por la incertidumbre el proceso de desescalada

30 abr 2020 . Actualizado a las 16:16 h.

Con muchas más dudas que certezas, el pequeño comercio y la hostelería ferrolanas se preparan para afrontar una desescalada para la que reclaman mayor definición. «El sector está confuso», resume el presidente del Centro Comercial Aberto Ferrol-A Magdalena, Cristóbal García Nores. «Queremos abrir, pero para que nos sirva de algo», expresa. Fue comparecer el presidente del Gobierno el pasado martes y desatarse una cascada de dudas que esperan que se aclaren en los próximos días. «Estamos con la ilusión de que tenemos una fecha, necesitábamos abrir ya. Pero lo que queremos es tener las cosas claras», reclama.

La incertidumbre la comparten en la Asociación de Empresarios de Hostalería de Ferrol e Comarcas, donde su gerente, Luisa Barro, transmite el sentir de los socios: «Lo que no podemos es abrir el 30 % de las terrazas. Es mejor dejar todo cerrado y abrir el 1 de junio con las medidas necesarias, no abrir a trozos». También traslada el rechazo a las mamparas, en aras de un mayor cuidado en la desinfección. Pero en todo caso, pide tranquilidad y aguardar a que la Xunta especifique las condiciones.

El chocolate y los churros del Avenida son una institución en Ferrol
El chocolate y los churros del Avenida son una institución en Ferrol JOSE PARDO

Emilio Vázquez, propietario del Café Avenida

«Si abro solo la terraza me volarían el dinero y los clientes»

Lo tiene claro: «No puedo salir del confinamiento, del estado de alarma y de los ERTE y solo trabajar la terraza». Emilio Vázquez es propietario de la cafetería Avenida, uno de los locales más emblemáticos de Ferrol, y a la sazón, presidente de la Asociación de Hostelería. Pero argumenta personalmente su rechazo al supuesto que permite la fase 1: «Yo no puedo. Abriría con seis mesas y sería como si no las tuviese: por muy bien que funcionasen, las cuentas no me salen», alega. «Una vez que abro la puerta, tengo que poner todo el negocio en marcha», y la caja que se haría con un 30 % de la terraza, esgrime, «no paga ni la luz». Y con el cambiante tiempo de la primavera ferrolana, «entre el viento y la lluvia sería tener seis mesas como si no las tuviese: me volarían el dinero y los clientes».

Vázquez apunta que tras la «incertidumbre tremenda» llegó el anuncio de la fecha, pero que es preciso conocer también las condiciones: las de seguridad y las laborales. «Si el aforo es de un 50 %, imagino que trabajaré con la mitad de la plantilla. Quiero saber si la mitad puede seguir en un ERTE y la otra mitad trabajando», demanda. Porque de lo contrario, advierte, «yo pasaría de un ERTE por razones de seguridad a un ERE por cuestiones económicas». La solución ofrecida «no nos arregla absolutamente nada: limita mucho más la apertura y vale más la pena esperar una semana más y abrir en otras condiciones», defiende el hostelero.

Material de protección. María López acopia en su boutique guantes y gel hidroalcohólico con vistas a la reapertura del negocio
Material de protección. María López acopia en su boutique guantes y gel hidroalcohólico con vistas a la reapertura del negocio JOSE PARDO

María López Niebla, responsable de la boutique Niebla

«¿Qué hago con el ERTE de mi empleada?»

En su boutique, María López Niebla hace cálculos sobre cuántas clientas podrá recibir simultáneamente a partir del 11 de mayo. «Supongo que dos», estima, aunque esa no es su máxima preocupación. «Veo factible empezar a funcionar, pero no creo que vaya a haber mucha gente en un principio», vaticina. A lo que suma la «incertidumbre» de retomar la actividad «sin indicaciones claras». Poner mamparas es inviable en negocios con el suyo, que no tiene el mostrador de cara al público, aunque «entiendo que con una pantalla [facial] es más que suficiente». De sus tres probadores, el del medio quedará inutilizado como medida de seguridad. Pero descarta la limpieza con ozono, para la que «se necesitaría una buena ventilación, y lo que tenemos aquí es la puerta», dice desde el 115 de la calle Magdalena. María busca ahora los productos más efectivos para desinfectar la ropa después de ser probada.

Y a todas estas dudas se suma la componente laboral. «Otra cosa que nadie dice es si yo abro, ¿qué hago con el ERTE de mi empleada?», se pregunta, que se supone concluye con el estado de alarma. «Estamos deseando abrir, pero está todo muy en el aire», estima: «Si al final abrimos el 11, pondremos activa la web, que es lo que más va a funcionar».

Dos salones. José Bañobre abrió hace quince años su negocio. El lunes comenzarán a trabajar siete empleados
Dos salones. José Bañobre abrió hace quince años su negocio. El lunes comenzarán a trabajar siete empleados JOSE PARDO

José Bañobre, propietario de dos peluquerías

«Ya me tardaba volver, con un poco de cabeza no va a haber problema»

Además de una gran sonrisa, un termómetro láser en la frente recibirá el lunes a las clientas y clientes en las dos peluquerías unisex que José Bañobre regenta, bajo su nombre, en Ferrol y Narón. Los abrigos irán, como de costumbre, al vestidor, pero envueltos en plástico. Y buena parte del material -capas de corte, batas, toallas e incluso algunos peines- serán de usar y tirar. «Ya tenemos todo preparado», asegura Bañobre, que ayer no soltaba el teléfono programando citas. Color y corte de caballero eran las tareas más demandadas.

«Al principio, como era todo un poco locura, sí me pareció bien lo de cerrar, pero ahora mismo, con un poco de coherencia y cabeza, no vamos a tener ningún problema. Ya es momento de volver, ya me tardaba», dice.