El Gobierno confirma que los niños de 0 a 3 años también podrán ir a centros educativos para permitir conciliar a sus padres

SOCIEDAD

Una escuela infantil cerrada
Una escuela infantil cerrada Eduardo Parra || EP

La Xunta dice que consultará con el Sergas el riesgo que pueda suponer reabrir las escuelas infantiles

30 abr 2020 . Actualizado a las 01:08 h.

El Ministerio de Educación ha confirmado que en la fase dos de la desescalada, que podría llegar a finales de mayo, la edad de los niños que podrán ir a centros educativos si sus progenitores no pueden conciliar la vuelta al trabajo con su cuidado abarca desde los cero a los seis años. Es decir, se incluye tanto la etapa de educación infantil que de ordinario se atiende a través de los colegios (de los tres a los seis años), como la que se realiza a través de la matriculación de los pequeños en escuelas infantiles (de cero a tres años).

Aunque Educación no ha aclarado cómo se organizará esa atención a los más pequeños —desde el ministerio afirman que en los próximos días se establecerá un protocolo con las medidas que habrá que adoptar—, esa confirmación supondría que no solo tendrían que reabrir aulas en los colegios, sino también en las guarderías, salvo que se permitiese atender a los pequeños en centros en los que no están matriculados.

En Galicia existen escuelas infantiles de distinto tipo: regidas por la Xunta, por los concellos, de iniciativa social y de particulares. Pero ni las Administraciones ni el sector privado han sido consultados al respecto de la medida, por lo que desconocen cómo les afectará la reapertura planteada por el Ejecutivo central.

El propio presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, criticaba ayer lo «difuso y confuso» de la idea del Gobierno. Y se mostraba sorprendido de que el criterio para reabrir los centros de educación infantil se basase en «se os pais teñen traballo ou non». «Dicir que ás garderías poden ir os fillos dos pais que teñan traballo e non os dos que non o teñan, eu dende logo non estou dacordo con ese criterio», indicó Feijoo, que incidió en que la Xunta consultará con expertos del Sergas «que risco poden ter os rapaces por volver ás garderías».

Los mayores de seis años

Aclarado el límite inferior de edad, las críticas se repiten respecto al hecho de que no se dé la misma posibilidad de conciliar a través de las aulas a quienes tienen hijos mayores de seis años. «Será necesario facilitar medidas de conciliación pensando en todo el alumnado. Los mayores de seis años también necesitan ser atendidos mientras su familia trabaja», censuraba ayer Pedro José Caballero, presidente de Concapa, que requería al Ejecutivo de Sánchez clases presenciales «para todos o para ninguno».

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, que compareció en rueda de prensa, aseguró que entendía la «preocupación» de los padres, pero se limitó a indicar que «todos los mecanismos para la conciliación serán tenidos en cuenta por el Gobierno» y se remitió a las órdenes que «en su momento» dictarán para concretar las medidas.

Las guarderías privadas, dispuestas al regreso, pero «con garantías»

Representantes de las escuelas infantiles privadas mantuvieron este miércoles una reunión con la directora xeral de Familia, Amparo González, para exponerle la situación «crítica» que atraviesan. El encuentro no sirvió para aclarar las circunstancias de una hipotética reapertura, dado que la Consellería de Política Social, de la que dependen estos centros, no ha recibido todavía ninguna directriz.

Desde la Asociación Galega de Escolas Infantís (Agadei) aseguran que las guarderías privadas están «dispuestas» a reabrir cuando se les requiera, pero siempre «con garantías». En ese sentido, pidieron que la Xunta solicite al Gobierno la reapertura de los centros «con un protocolo de seguridad». Advirtieron que precisan saber cuanto antes las nuevas ratios de alumnos, porque será necesario reincorporar a parte del personal sometido a ERTE, así como adaptar «programaciones y metodologías». También solicitaron ayudas económicas directas ante el riesgo de que muchos centros deban cerrar tras la parada de actividad.