El Gobierno organiza la desescalada en cuatro fases y por provincias: la normalidad llegará a finales de junio

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID / LA VOZ

SOCIEDAD

Sánchez avanzó la hoja de ruta aprobada por el Ejecutivo que está sujeta a cambios en función de la evolución del coronavirus

11 may 2020 . Actualizado a las 20:19 h.

El sábado 2 de mayo se permitirá la actividad física y los paseos controlados, excepto para mayores de 65 años y personas de riesgo, que tendrán que esperar al lunes 4, cuando arranca el plan diseñado por el Gobierno para abordar la desescalada tras más de seis semanas de estricto confinamiento. Constará de cuatro fases. Será, por tanto, «gradual», como insistió este martes Pedro Sánchez. Será también «asimétrico», basado en una unidad de acción que finalmente ha sido fijada en la provincia y cada una de las islas de los dos archipiélagos. No se permitirá la movilidad de una a otra a lo largo de todo el proceso, que como mínimo se extenderá hasta el próximo 22 de junio. Y por último, el plan será «coordinado» por Moncloa a través del ministerio de Sanidad.

El jefe del Ejecutivo avanzó las líneas maestras de esta hoja de ruta para la que, confirmó, necesitará volver a solicitar un nuevo permiso al Congreso que le permita prorrogar un estado de alarma que favorezca su ejecución.

A lo largo de toda la desescalada, el uso de mascarilla está «altamente recomendado» en el transporte público y en sitios donde sea más complicado mantener la distancia de seguridad, establecida en los dos metros.

Fase 0 

4 de mayo

Todas las provincias partirán el lunes desde este punto. Durante esta fase se permitirá la apertura de locales o establecimientos comerciales como peluquerías o centros de fisioterapia con cita previa para la atención individualizada de clientes. Los restaurantes podrá reabrir sus puertas, pero solo para servir comida a domicilio. También comenzarán los entrenamientos «básicos» de deportistas en ligas profesionales y federados.

A lo largo de esta fase, que Sánchez llamó como de «preparación de la desescalada», se aprovechará para intensificar la preparación de todos los locales públicos de cara a la siguiente etapa.

Como excepción, las islas de Formentera (Baleares), Gomera, La Graciosa y El Hierro (Canarias) entrarán directamente en la siguiente fase debido al control que tienen sobre la pandemia.

La fase 0 tendrá una duración mínima de dos semanas, un plazo que el presidente justificó por responder al «período medio de incubación del virus».

Los cuatro marcadores

Por tanto, a las dos semanas, el Ministerio de Sanidad decidirá las provincias que promocionan de nivel, una decisión final que dependerá de los siguientes marcadores: la capacidad del sistema sanitario (fundamentalmente, la atención primaria y capacidad de camas en ucis), la situación epidemiológica en cada zona, el avance de la implantación de medidas colectivas de seguridad para evitar contagios y los datos de movilidad y socioeconómicos.

De este modo, a partir del 11 de mayo, en función de los que decida Sanidad en base a estos cuatro termómetros, las provincias que cumplan los requisitos exigidos podrán saltar al siguiente nivel.

Fase 1 o inicial

No antes del 11 de mayo

Posibilidad de contacto social con personas no vulnerables ni patologías previas, todavía sin detallar. Se permitirá el inicio parcial de algunas actividades económicas restringidas hasta la fecha, como el pequeño comercio, aunque bajo condiciones de seguridad. Los centros comerciales permanecerán cerrados, salvo los establecimientos que han sido considerados esenciales desde la declaración del estado de alarma, que podrán trabajar como hasta la fecha. En todas ellas se habilitará un horario preferente para los mayores de 65 años.

Restauración

En el ámbito de la restauración, podrán abrir las terrazas de los bares y cafeterías con un límite del 30% de su aforo habitual. Las mesas de las terrazas pueden aumentar proporcionalmente si los hosteleros logran ampliar sus dominios. También podrán reabrir sus puertas los hoteles, pero excluyendo zonas comunes, que permanecerán precintadas.

En esta fase también se permitirá la reanudación del sector agroalimentario y pesquero en los estándares previos al estado de alarma. Las iglesias y otros lugares de culto podrán abrir siempre y cuando no superen un tercio de su aforo. Permiso para velatorios, aunque para un número determinado de familiares, todavía sin especificar.

Reactivación de los mercadillos, previa autorización de los ayuntamientos, aunque deberá aumentarse el área en el que tradicionalmente se llevan a cabo o las licencias expedidas menguarán hasta un máximo de un 25% de su capacidad máxima.

Limitación de ocupación de vehículos privados, salvo personas que residan en la misma casa.

Apertura de centros educativos y universidades para su desinfección y el trabajo administrativo y preparatorio de los docentes. Reactivación de los laboratorios universitarios. Regreso a las bibliotecas, para servicio de préstamo y lectura, aunque con aforo limitado para este último.

Espectáculos al aire libre para un máximo de 200 personas sentadas. Permiso para la producción audiovisual y rodaje de cine y series.

También reabrirán sus puertas los centros de alto rendimiento. Se prevé para esta fecha el paso de un entrenamiento «básico» a uno «medio» en los equipos en ligas profesionales. Apertura de recintos deportivos (sin público) en deportes en los que no exista contacto, como tenis o atletismo.

Permiso para la celebración de seminarios y congresos científicos con menos de 30 asistentes y respetando la regla de los dos metros de distancia interpersonal.

De nuevo, a las dos semanas, Sanidad volverá a decidir qué provincias promocionan. 

Fase 2

No antes del 25 de mayo

Los que no puedan garantizarlo, deberán prohibir la presencia de más de un cliente al mismo tiempo. Apertura de cafeterías (no solo para llevar o terrazas) y servicios de atención en mesa en restaurantes, aunque siguiendo siempre las recomendaciones de aforo. Permiso para la celebración de bodas y grandes banquetes, aunque bajo control. Discotecas y clubes nocturnos permanecerán cerrados.

Apertura de los centros educativos para menores de 6 años siempre y cuando los padres justifiquen que no pueden atenderlos debido a la realización de un trabajo presencial. Reapertura de los centros de educación especial y de las residencias de investigadores. También podrán abrir las autoescuelas y las academias.

Se permitirán las visitas de un familiar a personas con discapacidad en residencias y viviendas tuteladas, salvo en el caso de las residencias de mayores.

Reapertura de las clases con carácter voluntario para alumnos de 4º de Eso y Bachillerato. Las clases de más de 15 estudiantes se dividirán en dos grupos.

Permiso para la reactivación de los establecimientos en centros comerciales cerrados hasta la fecha, aunque las zonas comunes de los complejos permanecerán cerradas.

Pesca y caza

En esta fase se permitirá también la práctica de la caza y la pesca deportiva. En el ámbito del ocio y de la cultura, se reabrirán teatros con butaca reservada y respetando una limitación del aforo de un tercio de su capacidad. También el mismo límite para salas de exposiciones y conferencias.

Se permitirán conciertos en salas para menos de 50 personas, siempre y cuando se respete la norma del tercio. Al aire libre estarán habilitados espectáculos con un público hasta un máximo de 400 personas, siempre y cuando sea sentado. Los lugares de culto amplían su capacidad del tercio a la mitad de su aforo.

Reactivación de las grandes ligas, aunque solo se podrá disfrutar de los partidos a través de la televisión, ya que la presencia de público en gradas muy limitada. También en la esfera deportiva, regreso a los entrenamientos de las ligas no profesionales federadas.

Se permitirán los viajes a segundas residencias siempre que estén en la misma provincia. 

Las provincias que cumplan los requisitos podrán promocionar al último nivel antes del regreso a esa «nueva normalidad» de la que hablan desde el Gobierno hasta la aparición de una vacuna o un remedio contra el virus.

Fase 3 y última

No antes del 8 de junio

Apertura de las playas y piscinas. Sanidad no lo especifica, pero se entienda que de forma controlada.

Se permitirán visitas a centros de mayores, también por regular.

La capacidad permitida en los locales y establecimientos de restauración sube hasta el 50% de sus respectivos aforos, pero siempre habrá que respetar la distancia mínima de 1,5 metros de distancia entre personas que permanezcan de pie en el local. La capacidad de las terrazas podrá aumentar hasta el 50%. Las discotecas y otros clubes nocturnos reabren sus puertas, aunque con una limitación de su aforo a un tercio. Reabren también las zonas comunes de los hoteles, aunque también con su capacidad mermada hasta un 50%.

Las zonas comunes de los centros comerciales podrán volver a ser utilizadas, aunque con su aforo limitado a la mitad.

Los puestos en los mercadillos podrán pasar del 25% al 50% de su capacidad.

En el ámbito cultural, las actividades que disponían de una capacidad máxima de un tercio de su aforo podrán expandirse también hasta el 50%. Los espectáculos al aire libren pasan de 400 personas a 800, aunque deberán permanecer sentadas. Apertura de las plazas de toros, aunque con presencia de público muy restringida. Se permitirá el acceso de más gente a las gradas de estadios de fútbol y otros recintos deportivos, para un máximo de un tercio del aforo total. También abrirán recintos cerrados para la práctica deportiva, aunque en actividades donde no exista contacto. El ejemplo que ponen desde el Ministerio en este apartado son las pistas de patinaje. Reapertura de los gimnasios, aunque con vestuarios cerrados y solo para una tercera parte de su capacidad.

Fin de la desescalada

De este modo, las restricciones no acabarían como mínimo hasta el 22 de junio. Hasta este día el paso de una provincia a otra quedará prohibido salvo para los casos justificados y que ya se recogían en el decreto que regula el estado de alarma. De todos modos, para esta fecha solo se levantarán las restricciones en aquellas provincias o islas que cumplan con los requisitos. Es decir, se trata del calendario más optimista. «A finales de junio estaríamos en una nueva normalidad», afirmó Sánchez, aunque insistiendo siempre en que esta hoja de ruta está sujeta a cambios. «Vamos a iniciar una travesía sin disponer de un GPS preciso, porque no existe. Este plan es flexible y adaptativo», detalló.

Según avanzó en su comparecencia, para elaborar este Plan para la transición hacia una nueva normalidad, el Gobierno ha analizado las experiencias internacionales disponibles, «pero siempre para adaptarlas a la realidad de nuestro país», dijo, justificando así los motivos por los que ha rechazado establecer fechas concretas para todo el territorio nacional, como han optado otros países del entorno azotados por la pandemia.