El PSOE oculta su plan y no llamó a nadie cinco días después del anuncio del presidente
14 abr 2020 . Actualizado a las 09:31 h.Pedro Sánchez avanzó el pasado jueves en el Congreso que a lo largo de esta semana comenzaría a citar a los líderes de todas las fuerzas políticas parlamentarias, a los representantes de los principales agentes sociales, a los presidentes autonómicos y a las cabezas visibles del municipalismo. Tal y como reafirmó el domingo en su comparecencia por televisión, el objetivo es reeditar unos nuevos Pactos de la Moncloa para explorar un «gran acuerdo por la reconstrucción social y económica» tras el azote del coronavirus. Pero de momento sigue sin descolgar el teléfono, y no lo hará hasta el jueves de esta semana, tal y como confirmó ayer el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, alegando que hoy y mañana hay actividad en la Cámara Baja.
«Es curioso ver por la tele que está apelando a los pactos y a la colaboración con las fuerzas políticas y lleva diez días sin llamar al líder de la oposición», lamentó Pablo Casado ayer en una entrevista concedida a Antena 3. El presidente del PP volvió a dejar constancia que hasta ahora «siempre» atendió a las llamadas del jefe del Ejecutivo. Y a pesar de las dudas desprendidas ayer por su secretario general, esta vez no será una excepción. Otra cosa distinta es lo que salga de la misma. Casado aprecia en esta idea una «cortina de humo» o «un globo sonda» en la que la única pretensión de Sánchez es «entretener» para desviar la atención de los «temas urgentes», afirmó. «Yo lo que le pido son pactos por las mascarillas, pactos por los test, pactos para evitar el paro», señaló.
Si las posiciones de partida entre el Gobierno y el PP están muy alejadas -Casado acusó el jueves a Sánchez de haber «volado todos los puentes» entre ambos- todavía lo están mucho más de la tercera fuerza en la Cámara Baja. Vox ni está ni se le espera. Buena prueba de ello son las condiciones que estableció ayer su portavoz, Jorge Buxadé, para participar en esta ronda: «la exclusión de los separatistas y del golpismo chavista», es decir, de Podemos; y la dimisión del Gobierno en bloque para dar paso a uno repleto de tecnócratas.
Mientras, en Cs, en donde reclaman la paternidad de la idea, sí dan a entender que puede salir algo positivo de esta ronda de Moncloa. Eso no evita que acudan con recelos ante el temor de que «se quede en una foto».
En el PNV, «sin la menor idea»
Si la partida no pinta fácil por la parte derecha del tablero, tampoco lo parece entre los socios de investidura. «No sé si se va a hacer esta semana, qué día, cómo van a ser o si habrá una ronda individual, no tengo la menor idea», afirmaba ayer en RNE el portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban. ERC ya hizo constar en los últimos días su rechazo, y que su prioridad es el derecho a la autodeterminación. Lo mismo JxCat. Así, junto a los diez diputados de Cs, a priori solo parece que la idea pueda llegar a cuajar con las formaciones más minoritarias de la Cámara.
El PNV quiere empezar a hablar de Presupuestos para evitar otras elecciones
El PNV prefiere que se empiece a hablar ya del próximo proyecto de los Presupuestos que de unos Pactos de la Moncloa que considera predestinados al fracaso. Su portavoz en el Congreso, Aitor Esteban, advirtió ayer que si el Gobierno no logra sacarlos adelante, esto «nos aboca a una crisis gubernamental» y probablemente a unas elecciones. «Y en la situación en la que estamos, unas nuevas elecciones no sería el escenario más ideal», dijo, en una entrevista en RNE, recordando la importancia de su formación a la hora de formar una mayoría.
El BNG recuerda que ya no estuvo en 1977 y teme un nuevo proceso de recentralización
F. B.
El BNG también muestra su rechazo a la idea de los Pactos de la Moncloa. «Sería impensable, imposible», dicen, que las pretensiones socioeconómicas y soberanistas de esta formación «puedan ser acordadas por esa derecha ultra españolista». «No tenemos ninguna perspectiva para que vaya a ser la vía para una salida», afirma el diputado Néstor Rego, que recuerda que su formación ya se descolgó de los acuerdos firmados en 1977. Rego desconfía que este proceso político pueda suponer «un nuevo proceso de recentralización» estatal.
García-Page propone un pacto paralelo solo para Castilla-La Mancha
El presidente de Castilla-La Mancha, el socialista Emiliano García-Page, ha ofrecido al PP y Ciudadanos una reedición de los Pactos de la Moncloa a nivel autonómico que permita abordar la reconstrucción social y económica tras la crisis pandemia. «Ocurra lo que ocurra» en España el Gobierno castellanomanchego «se va a empeñar» en que exista ese pacto a nivel regional, aseguraron a Europa Press fuentes del Gobierno, que cuenta con mayoría absoluta.
