Carmen Otero: «La colaboración de la Costa da Morte es espectacular, muy solidaria»

Melissa Rodríguez
melissa rodríguez CARBALLO / LA VOZ

SOCIEDAD

JORGE PARRI

La gerente del Hospital Virxe da Xunqueira de Cee habla ya de una «fase de contención», aunque con cautela

13 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Carmen Otero Suárez es la gerente del Hospital Virxe da Xunqueira de Cee desde el año 2017. Cuenta que el pasado día 15 de marzo diagnosticaron al primer paciente con coronavirus en el centro. Desde aquel momento trataron, al menos, 45 positivos. Algunos tuvieron que ser derivados al Complejo Hospitalario Universitario A Coruña por su gravedad y otros se quedaron por el camino. Lo cierto es que la cifra de ingresados en planta es cada vez menor (ayer eran cuatro), y por este motivo, y teniendo en cuenta los demás datos en Galicia y España, la directora habla ya de que estamos en una «fase de contención», aunque lo dice con cautela.

-¿Cómo fue el proceso de adaptación del hospital, tanto en instalaciones como en material y personal, a la pandemia?

-Lo que primero hicimos fue reorientar la actividad del centro. Suspendimos toda aquella ordinaria que era demorable tanto en consultas como en pruebas y cirugías, y se pasó la que era posible a consultas telefónicas para, a partir de ahí, atender la actividad patológica COVID-19. En este sentido, hubo que hacer reubicación de espacios con los medios que tenemos. Así, dividimos las urgencias en dos zonas: una para los pacientes con síntomas de coronavirus, y otra para aquellos con otro tipo de problemas. También ampliamos la capacidad de hospitalización, vaciando el gimnasio de rehabilitación y colocando diez camas con todos los servicios necesarios. Respecto a esto último, se trata de una unidad que de momento no tuvimos que usar y que esperemos que así siga siendo.

-La puesta en marcha del Covidauto fue fundamental para la detección de nuevos casos, ¿no?

-Sí, te da una información en tiempo real de cómo esta evolucionando la enfermedad que es muy importante. Ha sido una manera de aumentar el número de test que podíamos hacer. Ahora mismo tenemos en marcha tanto la recogida de muestra en coche del particular como a domicilio.

-En algún momento se vieron escasos de material de protección. De hecho, hicieron un llamamiento a la solidaridad de la población. ¿Cuál fue la respuesta recibida? ¿Sirvió de mucha ayuda?

-Al inicio del estado de alarma sí que se produjo una situación de un poco de necesidad. Y efectivamente recibimos la solidaridad de todos los vecinos y las instituciones de la comarca. Desde centros educativos a cofradías de pescadores, concellos, personas a título particular y empresas, nos donaron fundamentalmente guantes, batas, mascarillas y gafas de protección integral. La verdad es que la colaboración de la Costa da Morte es espectacular, es una comarca muy solidaria.

-¿Ahora están servidos?

-Sí, en estos momentos este problema está solucionado, pero el aprovisionamiento tiene que seguir ahí para estar preparados por si hay un repunte de casos.

-¿En qué fase diría usted que estamos?

-Parece que estamos entrando en una fase de contención. El número de contagios en la comunidad ha bajado de 1 a 0,8, lo que quiere decir que cada persona infecta a menos de una, con lo cual la previsión que dan los modelos epidemiológicos es que la cifra de infectados vaya disminuyendo. Y nosotros seguimos el mismo ritmo que el resto. Pero de momento hay que ser muy prudentes porque el período de incubación es muy largo y como es una enfermedad nueva hay que seguir el comportamiento. Y es que se comporta de forma un poco errática. Lo vemos en países como Italia, que iba bien y de repente, las cosas parece que no son tan claras. Pero en estos momentos podemos decir que los datos son esperanzadores.

-¿Cómo describiría la evolución de este virus en la Costa da Morte?

-La evolución no ha sido exponencial en el mismo sentido que en otras zonas españolas o gallegas. Tiene que ver con la distribución de nuestra población, que vive en núcleos más pequeños, rurales o semirrurales, y de un modo más aislado, de modo que no hay ese gran contacto humano de las ciudades grandes o medianas. Nosotros hemos tenido la enorme mala suerte, por nuestros pacientes, de que hubiera dos grupos de excursiones a Cataluña y Levante, y de que por lo tanto hayan servido como medio de transmisión, pues fueron los primeros casos que se detectaron. Pero creo que esto hubiese llegado por cualquier otra vía de contagio, pues sucede en todos los países de Europa.

«Los profesionales son el verdadero lujo de este centro, se han esforzado al máximo»

-Los sanitarios se han convertido en los verdaderos protagonistas de esta lucha, ya que son esenciales para combatirla. En su caso, usted representa a los del área de Cee. ¿Qué mensaje le mandaría a la población?

-El mejor mensaje que puedo mandar a la población y a mis sanitarios es que los profesionales de este hospital son el verdadero lujo de este centro. Se han esforzado al máximo, lo demuestran cada jornada; ponen todos los días a disposición de los pacientes, y nunca se desanimaron. Verdaderamente, considero que merecen un altísimo reconocimiento.