El Parlamento británico retomará las sesiones el martes 21
13 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Boris Johnson ya está fuera del hospital londinense de Saint Thomas, pero eso no significa que esté curado del COVID-19 ni que pueda volver al 10 de Downing Street para reasumir sus funciones. «El primer ministro ha recibido el alta hospitalaria y continuará su recuperación en Chequers [la residencia campestre de los jefes de Gobierno británico]», afirmó ayer a la prensa el portavoz del Ejecutivo, quien puntualizó: «Por consejo de su equipo médico, el primer ministro no regresará de inmediato al trabajo».
El anuncio de que el líder tory dejó el centro sanitario en el que ha estado desde el domingo de Ramos, y donde pasó tres noches en cuidados intensivos por el coronavirus, supone que el ministro de Exteriores, Dominic Raab, continuará teniendo las riendas del Gobierno como en la última semana.
Johnson aprovechó su alta para dejarse ver, a través de un vídeo que difundió por su cuenta de Twitter, y así despejar las dudas sobre su situación. «El NHS [la sanidad pública] ha salvado mi vida, sin duda», afirmó, para luego agradecer al personal sanitario que lo atendió, en especial a dos enfermeros (una neozelandesa y otro portugués), que, según admitió, estuvieron a su lado 48 horas.
Elogios a la sanidad pública
Pese a que el número de víctimas por la pandemia ayer ya superó en el Reino Unido las 10.000, tras registrarse 737 decesos el fin de semana, el premier se mostró confiado en que el país superará este reto como otros en el pasado. Hay que tener en cuenta que el balance no incluye a los muertos en residencias ni en casa, por lo que los fallecidos podrían ser un 20 % más.
«Sus esfuerzos están valiendo la pena y cada día prueban que valen la pena, porque aunque lamentamos la pérdida de aquellos que nos son arrebatados en números tan altos y la lucha no ha terminado, estamos haciendo progresos en esta batalla nacional […] Estamos haciendo progresos porque los británicos han formado un escudo humano alrededor de su bien más precioso: el NHS», declaró.
Las palabras de Johnson hacia la sanidad pública no sirvieron para apaciguar la polémica en relación a la falta de medios para evitar que los profesionales sanitarios se contagien del COVID-19 mientras lo combaten. Ayer el Real Colegio de Enfermeras recomendó a las enfermeras que rehúsen a tratar a pacientes con el coronavirus si no cuentan con mascarillas, guantes y demás material para protegerse, mientras desde el Gobierno se reconoció que aún hay fallos en la dotación.
El Parlamento también vuelve
Aunque la pandemia no parece estar cerca de estar controlada, la Cámara de los Comunes reanudará sus funciones el día 21, pero lo hará a través de videoconferencias para evitar que más diputados se contagien.
La decisión se produce después de que la mayoría de la oposición y algunos parlamentarios conservadores reclamaran la reanudación de la labores del Legislativo. «No hay sustituto para el escrutinio parlamentario, particularmente en este tiempo de crisis nacional. Las mejores decisiones son aquellas que son cuestionadas y están bajo escrutinio», advirtió el laborista Keir Starmer.