«Vendemos un 30 % de lo habitual en Semana Santa»

María Cobas Vázquez
maría cobas OURENSE / LA VOZ

SOCIEDAD

La Pascua está animando las ventas en la confitería Miguel de Ourense
La Pascua está animando las ventas en la confitería Miguel de Ourense MIGUEL VILLAR

Confiterías y pastelerías apuestan por el servicio a domicilio para tratar de salvar los números en el estado de alarma

08 abr 2020 . Actualizado a las 10:31 h.

Semana Santa es, como todas las fiestas en Galicia, una celebración con vertiente gastronómica. En pocas mesas faltan las roscas y no hay casa con niños en las que no se vea un huevo (o cualquier otra figura) de chocolate. Es por tradición una buena época para las pastelerías y las confiterías, pero, como en todos los sectores, el coronavirus lo ha puesto todo patas arriba.

De hecho, hay muchas pastelerías de la provincia que han decidido cerrar sus puertas mientras no se levante el estado de alarma, mientras que las que siguen levantando la persiana ven cómo sus ventas se han reducido drásticamente. «Vendemos un 30 % de lo que sería habitual en Semana Santa», cuenta Pilar Ávila propietaria junto a su hermana de confitería Miguel en Ourense, un negocio con 43 años de historia que heredaron de sus padres. Explica que «aunque hay muy poquita gente por la calle, no se pierde la costumbre de las monas y las roscas». Ellos siguen haciendo todos los productos que son habituales en sus vitrinas, aunque en menor cantidad. Con la Pascua las ventas se han animado estos días. Sobre todo desde la distancia. Ávila asegura que han aumentado los pedidos a domicilio, sobre todo de gente que está fuera de la provincia y quiere que a sus ahijados o a sus sobrinos no les falte el regalo dulce estos días. «Enviamos sobre un 95 % más que antes», apunta Ávila.

En O Barco de Valdeorras, Darlene Dobao decidió cerrar las puertas de la pastelería A Casiña al ver que no había ventas. «Pola semana non pagaba a pena abrir para non estabamos vendendo prácticamente nada», cuenta Dobao. Optó por hacerlo solo los fines de semana, y para estos días tiene servicio a domicilio con la idea de dar salida a las monas de Pascua que había encargado antes del estado de alarma. De lo que no se mueve nada, dice, es en lo que respecta a las tartas. «Como a xente non se pode xuntar, xa non se celebran os aniversarios, ata tiven varias anulacións de tartas encargadas», señala Dobao. En los tres años que lleva con el negocio, asegura que es el momento más duro.

También cerró Pastelería Pili en O Barco. «Tengo el teléfono operativo, pero está todo muy parado, no llama casi nadie», responden desde el negocio.

Son tres ejemplos de un sector que pasa por malos momentos. Desde la asociación provincial de confiteros y pasteleros de Ourense, cuyos socios se dividen casi a la mitad entre los que siguen abiertos y los que decidieron cerrar durante el estado de alarma, recuerdan que se cumplen las medidas de seguridad en los negocios y apelan a los ourensanos para que celebren la Pascua con un toque dulce.

Las pastelerías de la asociación que siguen abiertas son Davite, El Olivar, Migas, Miguel, Osi Gourmet y San Yago en Ourense, San Diego en Amoeiro, Santa Rita en Arnoia y Xinzo en la capital de A Limia.