«Si hay que sacar algo positivo de esto es que no debemos olvidarnos de la sanidad pública, y de cuidarla bien»

María Formoso lleva 20 años como enfermera da Xunqueira de Cee. No es de las primeras, porque se puso en marcha en el 98, pero casi, porque forma parte del equipo que contribuyó a poner en marcha una infraestructura largamente demandada en la Costa da Morte, a las órdenes del siempre recordado primer director, José Rey Aneiros (ya fallecido) en los tiempos en los que el clínico aún era una fundación. Hubo que batallar mucho para la plena integración en el Sergas. Estos días se enfrenta a una situación nunca imaginada.

-¿Cómo lo llevan?

-Ha sido un cambio total, radical. Hacemos nuestro trabajo, pero en una condiciones diferentes. Y sobre todo los primeros días con el miedo de enfermar, con lo que eso implicaría tanto para los tuyos como para los pacientes. En esas primeras jornadas no sabes a lo que te enfrentas, porque cada día van cambiando los protocolos, dónde atender a la gente, el equipo que va a trabajar... Te vas adaptando cada día. Por ejemplo, cuando se habilitan espacios para atención de pacientes que no son de coronavirus. Porque no olvidemos que los pacientes habituales siguen llegando, nadie está libre de un golpe, un accidente...

-¿Hay miedo?

-Hay preocupación, pero creo que es lo normal. De si lo puedes coger, de si lo cogiste, de si lo llevas a casa... Yo creo que eso es algo común en todas partes. Y te preocupas mucho por los pacientes, porque tú eres lo que ellos ven. Se quedan solos al entrar, y van a tratar contigo, a veces durante varios días.

-¿Ha habido muchos ingresos nuevos?

-Los ingresos por coronavirus han crecido, sí. Hay gente en planta, los datos son conocidos. De momento, todos los que se tratan están en planta.

-¿Ha notado un mayor apoyo de la gente? Ya sabe que ahora, a diario, son centro de aplausos, elogios y ánimos.

-Puede ser. Recibimos un montón de llamadas que nos dicen que nos cuidemos, etcétera. Sí se percibe. Tú vas a trabajar como siempre, pero tal vez ahora se ve más que estamos ahí para ayudar, para salvar vidas... A mí me emocionan esas cosa. Tal vez antes, alguna vez, eso no se veía tanto, o no se valoraba igual, De hecho, si de todo esto hay algo positivo que sacar, es que no debemos olvidarnos nunca de la sanidad pública, de cuidarla bien, muy cuidada. Cuando estás acostumbrado a tener algo parece que no lo valoras, pero hay que hacerlo.

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