El humor es la mejor herramienta del ferrolano Pepo Suevos para sobrellevar la enfermedad por la que lleva 19 días en cuarentena
03 abr 2020 . Actualizado a las 15:46 h.Con el hashtag #encerradosperononinútiles, el humorista ferrolano afincado en Bertamiráns, Pepo Suevos, ha iniciado un hilo de vídeos para ir contando cómo afronta su cuarentena tras ser diagnosticado de coronavirus. Eso si, quien los vea no podrá parar de reír. Es su forma de darle una visión positiva a una enfermedad en la que encara ya la recta final. «Yo llevo ya 19 días y ¡no me he vuelto loco!», bromea.
—¿Cómo lleva el vivir confinado entre cuatro paredes sin poder salir de la habitación?
—Estoy bastante bien, dentro de lo que cabe muy ocupado con llamadas.
—¿Recuerda cómo empezaron los síntomas cuando le diagnosticaron coronavirus?
—Empecé un viernes y sábado con algo de tos y 38 de fiebre. La semana anterior había estado en Madrid, así que llamé al teléfono de información, pero al principio como parecían síntomas leves no le dieron importancia. Pero como mi mujer es enfermera me hicieron la prueba porque si ella lo tuviese sería mucho más grave.
—Y desde entonces cómo es su día a día.
—Llevo ya 19 días entre estas cuatro paredes, sin apenas salir de mi habitación. Es mi mujer la que hace la comida y se encargada de todo. Comemos por turnos para no coincidir y yo bajo las escaleras de la casa como el fantasma de la ópera, pero con mascarilla.
—Cuelga un diario vídeos humorísticos en sus redes sociales.
—Empecé con ellos por casualidad. Cuando me dijeron que era positivo decidí publicarlo porque el fin de semana del 7 y 8 de marzo tuve varias actuaciones y fui pregonero de una fiesta gastronómica. Me pareció prudente avisar. Tuvo un enorme feedback de gente dándome ánimo, pero como yo ya sabía que estaba bien decidí ir colgando los vídeos para mostrar que también se puede llevar bien la enfermedad. Que te coja no quiere decir que vayas a morir en tres días.
—¿Cómo se encuentra?
—Pasé un par de días con fiebre, algo de tos y escalofríos. Y nada más. ¡Mis defensas deben estar pletóricas!
—Desde el inicio cómo se encuentra y su día a día, cómo hace ejercicio, luce la última moda con una mascarilla, dibuja...
—Cada día mando el parte de cómo estoy y aprovecho para hacer algo. Cuando estás encerrado entre cuatro paredes es fácil sucumbir al aburrimiento, venirte abajo, pero yo tengo otra forma de enfrentarme a las cosas. Pensé aprovechar estos días para hacer todo eso para lo que nunca tenía tiempo. Estoy intentando aprender a tocar la guitarra, desde pequeño quise hacer tallas de madera y se me ocurrió coger una navajita para probar, otro día me puse con un amigo pintor a hacer un dibujo... También intenté hacer deporte en un vídeo, pero casualidad que me dio un tirón ya no puede seguir.
—Tiene ahí material para su primer monólogo después del confinamiento.
—Si, si, está ya muy pensado. No solo con los vídeos que voy colgando, ya tengo ideas desde cuando me hicieron la prueba.
—¿Y cuánto tiempo le queda de cuarentena?
—Pues no tengo ni idea, estoy a expensas del sistema sanitario. Me controlan de forma telemática. Llamé a mi médico de cabecera a ver si me podía decir algo, por si se habían olvidado de mí, y estoy esperando.
—¿Qué es lo primero que hará cuando, al menos, pueda salir de su habitación?
—Estar con mi mujer y mi hijo. Nosotros vivimos en una casa y ganaré muchísimo cuando al menos me dejen salir al campo, pueda estar con las perras, ver una película con mi familia, comer con ellos. A veces sueño que cuando me digan que terminé la cuarentena seré una especie de superhéroe inmunizado que puede tocar todo y me podrá llamar la policía para hacer recados y ayudar a la gente.