Salvador Illa asegura que la expansión de la pandemia se estabiliza en España

S. G.

SOCIEDAD

Ricardo Rubio | Europa Press

El responsable de Sanidad indicó que la tasa de contagiados ha caído al 8 % y que los ingresos en las ucis han decrecido hasta el 4 % de hoy

01 abr 2020 . Actualizado a las 15:31 h.

La expansión de la pandemia del coronavirus remite en España. Así lo afirmó el ministro de Sanidad, Salvador Illa, que puso especial énfasis en la caída de la tasa de contagios de los últimos días. Según indicó, esta cifra cayó hasta el 8 % en el día de hoy, frente al 12 % de la pasada semana y al 20 % de hace quince días. 

A pesar de lo que parece ser brotes verdes, el responsable de Sanidad reconoció que se espera una semana «dura y complicada». Los datos así lo indican. A estas alturas, hay más de 102.000 personas infectadas, 7.719 más que ayer. 9.053 personas han fallecido en esta crisis, 864 más que ayer. El número de ingresados en ucis alcanza los 5.872 personas, 256 más que ayer. En total, como dato positivo se han curado 22.647 personas, 3.388 más. 

El principal campo de batalla de la pandemia del COVID-19 se libra ahora en las ucis. El ingreso en estas unidades ha caído del 7,2 % de ayer al 4 % de hoy. «De haberse mantenido la misma tasa de ayer, hubiera supuesto 111 casos más y, de haberse mantenido la tasa de contagios hubieran supuesto 1.503 personas más», afirmó Illa. 

Otra de las dudas que ha despejado el ministro es la relativa a la contabilización de las personas fallecidas. Afirmó que el protocolo es muy claro, por lo que toda persona que dea positivo en COVID-19 y fallezca se reflejará como fallecido por el virus. «Hemos tenido una absoluta transparencia en esta materia y la vamos a seguir manteniendo», ha recalcado.

Datos concretos

Preguntado por el hecho de que la Comunidad de Madrid haya mantenido este miércoles el mismo número que el martes de personas ingresadas en una UCI, Illa ha explicado que, según lo que le han trasladado desde la Consejería de Sanidad, ayer fueron dadas de alta unas 70 personas, lo que, sumadas a las que fallecieron, hizo que pudieran ocupar esas camas otros pacientes.