Las atoridades de la provincia de Henan imponen toques de queda y cierran negocios y comercios
01 abr 2020 . Actualizado a las 18:59 h.Al tiempo que la ciudad china de Wuhan, epicentro del primer brote de coronavirus, recupera poco a poco la normalidad, la provincia de Henan, también en el gigante asiático, decidía cerrar completamente el condado de Jia, ante el temor a una segunda oleada de contagios de COVID-19.
Las medidas introducidas en la zona, donde residen más de medio millón de personas, incluyen toques de queda, y la cuarentena obligatoria en la ciudad de Pingdingshan.
Según apunta Europa Press, los residentes necesitan autorización para realizar «cualquier tipo de movimiento» fuera de sus casas ahora que China ha comenzado a registrar un descenso de los contagios tras meses de restricciones (este miércoles 36 casos, todos menos uno importados, y siete fallecidos). Y además se les tomará la temperatura antes de realizar cualquier desplazamiento. El objetivo evitar un rebrote del coronavirus en el país.
Finalmente, todos los comercios y negocios del condado se han cerrado a excepción de las tiendas de alimentación, farmacias, gasolineras, hoteles y hospitales. Y los coches solo podrán circular en días alternos dependiendo de las matrículas.