El área sanitaria de Santiago sufre el peor día de la pandemia con otros tres fallecimientos
SOCIEDAD
El dato positivo del balance de ayer es el aumento de las altas hospitalarias, recibidas por veintitrés pacientes
30 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.El área sanitaria de Santiago y Barbanza sufrió ayer el peor día de la crisis sanitaria del coronavirus al registrar tres nuevos fallecimientos. Se elevan así a diez las muertes en la zona desde que comenzó el azote de la pandemia. La parte positiva del balance es que aumentan las altas hospitalarias en el segundo día que se producen, con veintitrés, que se suman a las seis contabilizadas en la misma área en las veinticuatro horas anteriores.
Los tres fallecidos son dos varones de 82 y 74 años de edad que estaban internados en el Complexo Hospitalario Universitario de Santiago y una mujer de 81 años ingresada en el Policlínico HM La Rosaleda. Los tres habían sido diagnosticados de coronavirus y tenían patologías previas.
El último informe diario facilitado por el área sanitaria de Santiago y Barbanza señala asimismo que hay 480 personas diagnosticadas de Covid-19, de las que 131 están hospitalizadas y 349 están controladas en su domicilios. De las hospitalizadas, 111 se encuentran en hospitalización convencional (diez en La Rosaleda, dos en el hospital de Barbanza y las restantes en el Clínico compostelano) y otras veinte en unidades de cuidados críticos. En el área sanitaria se han efectuado hasta ahora 2.478 pruebas, que son 294 más en las últimas veinticuatro horas.
Además, la pandemia continúa golpeando con fuerza en las residencias de mayores. En Santiago, el peor foco sigue correspondiendo a la Domus Vi San Lázaro, donde se encontraban cinco de los diez fallecidos en el área sanitaria compostelana y veinticinco infectados, todos ellos usuarios, aparte de once trabajadores, dato este último que no ha variado desde el sábado.
También hay otro usuario infectado de coronavirus en la residencia José Otero, de Pontepedriña, pero ningún trabajador de esta ha resultado contagiado, al contrario de lo ocurrido en la residencia San Simón, en Teo, donde no ha habido hasta ahora ningún mayor residente afectado pero sí un trabajador, al igual que, en lo que respecta a centros para discapacitados, en la vivienda tutelada de Aspas de Santiago.