El Gobierno quiere reducir la movilidad a la de un domingo

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El Consejo de Ministros ha aprobado paralizar las actividades no esenciales con el fin de disminuir la expansión del coronavirus

29 mar 2020 . Actualizado a las 17:46 h.

El Consejo de Ministros extraordinario reunido este domingo ha aprobado la paralización de las actividades no esenciales entre el 30 de marzo y el 9 de abril, ambos inclusive, para frenar la propagación del COVID-19 y reducir la movilidad a la de los fines de semana, a través de un permiso retribuido recuperable, por lo que los trabajadores no perderán su salario pero tendrán que recuperar horas tras el estado de alarma.

La portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha resaltado en la rueda de prensa posterior junto con la ministra de trabajo, Yolanda Díaz, que el «esfuerzo importante» de los ciudadanos con el confinamiento «empieza a dar sus frutos sin duda» al reducirse el contagio, si bien ha matizado que las nuevas medidas «extraordinarias, de envergadura y de gran calado» pretenden reducir «al mínimo» la expansión del virus y la movilidad al nivel que se registra un domingo del estado de alarma.

«Hay que dar un paso más para conseguir los días antes de Semana Santa que la movilidad sea la correspondiente a la de un fin de semana»

«Estamos cada vez más cerca de doblegar la curva pero hace falta esfuerzo adicional», por lo que «hay que dar un paso más para conseguir los días antes de Semana Santa que la movilidad sea la correspondiente a la de un fin de semana», ha destacado Montero, quien ha apuntado que la nueva suspensión de actividades no esenciales trata de anticipar la Semana Santa y «ganar tiempo» para el sistema sanitario, con el fin de que esté «tensionado pero no saturado» y pueda atender a las personas más vulnerables a la enfermedad.

El permiso retribuido recuperable no afectará a las personas que trabajen a distancia, teletrabajen ni a los trabajadores incluidos en expedientes de regulación de empleo temporal (ERTE) de suspensión de contratos. Tampoco podrán acogerse a él los trabajadores que estén de baja por incapacidad temporal (IT) o por maternidad y/o paternidad, a los excluidos por el decreto de estado de alarma y a los profesionales considerados esenciales, como el personal sanitario o las fuerzas de seguridad del Estado, según han explicado Montero y Díaz en la comparecencia telemática.

Los empleados incluidos en ERTE de reducción de jornada tendrán que quedarse en casa la dos próximas semanas, pero a través de este permiso retribuido recibirán la parte proporcional correspondiente a las horas que debían realizar, que también deberán recuperar más adelante, ha precisado Díaz, que ha comunicado que este permiso ha sido «consultado» a sindicatos y empresarios.

El decreto en el que se regula este permiso retribuido, que Montero ha calificado como «inédito» en el ordenamiento jurídico, afectará al personal laboral que presta servicios esenciales en el sector público y privado y con él «cederán las dos partes», según la ministra de Trabajo, pues los empresarios «pagarán todos y cada uno de los conceptos retributivos» y los trabajadores tendrán que devolver las horas no trabajadas, teniendo para ello como plazo máximo el 31 de diciembre del 2020.

«No imponemos cómo devolver las horas»

Díaz ha explicado que serán trabajadores y empresarios los que decidirán, en la negociación colectiva, cómo se devuelven estas horas no trabajadas, y ha advertido de que en esta devolución deberán respetarse los descansos de jornada diarios y los descansos semanales y ser compatible con los derechos de conciliación. «No imponemos cómo devolver las horas», ha dicho la ministra, que ha afirmado que, en cada sector, se decidirá cómo distribuir estas horas. «Es un permiso muy flexible», ha destacado Díaz.

La ministra de trabajo ha subrayado que el Gobierno ha puesto el interés general por encima de los intereses particulares y ha advertido de que el Ejecutivo «no va a aceptar presiones de ningún tipo en orden a alterar este confinamiento». «Nadie pierde derechos, ni empresas ni trabajadores, y quien gana es la economía», ha resaltado. Díaz ha negado que estas medidas de suspensión de actividades no esenciales supongan «vacaciones obligatorias» y ha indicado que solo se trata de ochos días laborables si se restan los festivos de Semana Santa.

Preguntada por si las empresas podrán seguir presentando ERTE durante las próximas dos semanas, Díaz ha señalado que por supuesto que podrán. No obstante, al estar obligados los trabajadores de actividades no esenciales a quedarse en casa hasta el 9 de abril, algunas empresas no podrán recurrir a ERTE, al menos mientras dure la suspensión de estas actividades.