Los británicos podrán hacerse la prueba instantánea sin salir de casa y adquirirla por Internet en Amazon

J. F. Alonso LONDRES / LA VOZ

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Boris Johnson compró 3,5 millones de testi, que también podrán obtenerse en las farmacias

27 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Sin tener que dejar sus casas los británicos podrán saber si son o fueron portadores del Covid-19, pues el Gobierno de Boris Johnson ha adquirido 3,5 millones de pruebas rápidas, a las que los ciudadanos podrán someterse ellos mismos. Sharon Peacock, directora del Servicio de Infecciones del Sistema de Salud de Inglaterra (PHE, por sus siglas en inglés), explicó en una comparecencia ante el Comité de Ciencia y Tecnología del Parlamento que los test rápidos operan de manera similar a los utilizados en la actualidad para detectar embarazos. Los pacientes solo tendrán que pincharse un dedo, extraer una gota de sangre y colocarla en el dispositivo, el cual en un lapso que va de 10 a 15 minutos hallará si en la muestra hay rastros de los anticuerpos que genera el coronavirus. «Compramos millones de pruebas, y una vez que concluyan los exámenes a las que están siendo sometidas (para certificar su eficacia) comenzarán a ser distribuidas entre las comunidades», afirmó la funcionaria ante los diputados.

3,5 millones de kits

El ministro de Salud, Matt Hancock, anunció a principios de esta semana que el Gobierno compró 3,5 millones de kits, que serán puestos a disposición de los médicos y enfermeras que están combatiendo la pandemia, para conocer si habían sido contagiados o si podían seguir trabajando. Los británicos podrán adquirir las pruebas en las farmacias, pero aquellos temen salir a la calle debido al riesgo de contagio, podrán recibirla directamente en sus casas. ¿La razón? Amazon, el gigante de las ventas por Internet, decidió colaborar con su distribución. Aunque las autoridades aún no han revelado el precio, durante su comparecencia ante el Comité parlamentario, Peacock aseguró que será «mínimo». Además, la experta indicó que las pruebas rápidas permitirán a los ciudadanos saber si deben permanecer en cuarentena y evitará colapsar más los centros de salud, al ofrecer a asistencia a distancia a los positivos.

Pero los esfuerzos británicos no se limitan a la detección y al tratamiento. Ayer, desde el número 10 de Downing Street se anunció que Johnson ofreció 210 millones de libras (250 millones de euros) para financiar las investigaciones para la vacuna contra el Covid-19. El premier hizo la promesa tras participar en una videoconferencia con los líderes del G20, en la cual todos se comprometieron a dar «una respuesta científica global, transparente, robusta, coordinada y basada en la solidaridad» a la pandemia.