Las urgencias de los hospitales de Leganés y Alcalá de Henares colapsaron el fin de semana con pacientes hacinados en pasillos

Iago García
I. García REDACCIÓN

SOCIEDAD

Fernando Villar | efe

Las imágenes fueron grabadas en vídeo por varias personas que acudieron a los centros, los sindicatos lo han denunciado y no ha sido hasta este lunes cuando la Comunidad ha «aliviado» la situación derivando pacientes

23 mar 2020 . Actualizado a las 21:40 h.

Los vídeos subidos a Twitter por diversos usuarios dan muestra del caos y de la falta de atención vivida en los centros hospitalarios que la Comunidad de Madrid tiene en Leganés y Alcalá de Henares. Las Urgencias completamente desbordadas en los hospitales públicos de estas localidades y los pacientes hacinándose en los pasillos. En algún caso, ni siquiera tienen una silla donde sentarse o no se dispone de camillas para su atención, siendo grabados directamente en el suelo. La situación está provocada por el crecimiento exponencial del coronavirus, que tiene en Madrid el epicentro de todo el país, con cerca de 11.000 contagios y más de 1.200 muertes.

La situación límite en el hospital universitario Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares o el Severo Ochoa de Leganés, lleva muchos días siendo denunciado por sindicatos médicos como MATS o CC.OO Sanidad Madrid. Este último ya señalaba el viernes que en el caso del hospital de Leganés, las urgencias estaban tres veces por encima de su capacidad. Su delegada sindical en este centro, Mercedes Romero, indicaba que «estaban desabastecidos» y que ya «no había espacio físico» para poner camillas.

El gran número de pacientes esperando a ser atendidos en pésimas condiciones en el Severo Ochoa, ha sido una constante hasta este lunes, momento en el cual han comenzado a derivarse pacientes, según recoge la agencia Europa Press.  

Fuentes procedentes del complejo hospitalario señalan que han sido derivados más de 170 pacientes con coronavirus a otros centros, lo cual ha supuesto un «balón de oxígeno» para el servicio de Urgencias, que ahora están «más aliviadas». Desde centro precisan que ahora los pacientes están «en camas y sillones cómodos» y que el personal sanitario realiza sus labores «sin la presión asistencial sufrida el fin de semana».