Las funerarias exigen al Ministerio un protocolo para evitar contagios entre su personal

Cristina Barral Diéguez
Cristina Barral PONTEVEDRA / LA VOZ

SOCIEDAD

RAMÓN LEIRO

El grupo Gallaecia, que agrupa a empresas de las cuatro provincias, también reclama epis y un protocolo para actuar en caso de fallecimiento por coronavirus

22 mar 2020 . Actualizado a las 19:13 h.

El grupo Gallaecia, formado por empresas funerarias con representación en las cuatro provincias gallegas, exigió este domingo al Ministerio de Sanidad una regulación de las actuaciones del sector para prevenir así posibles contagios por coronavirus. Lo hacen a través de un escrito en el que explican la situación que viven actualmente los profesionales del sector. «Las empresas funerarias no contamos con unas directrices sobre cómo actuar cuando los trabajadores deben realizar la recogida de un fallecido en un centro sanitario, en un centro de mayores o en un domicilio privado», señala uno de los socios fundadores de Gallaecia y gerente de Funeraria San Marcos en Pontevedra, Juan Perdiz.

«Esta situación, sumada al desabastecimiento generalizado de equipos de protección individual (epi), pone en riesgo a los profesionales del sector», añadió Perdiz. Asimismo, desde Gallaecia apuntan que no solo existe falta de regulación en la recogida de fallecidos por causas naturales, «lo más sorprendente es que no se hayan ofrecido indicaciones sobre cómo actuar cuando el fallecimiento se ha producido por coronavirus», apuntan. Es por ello que reclaman que, del mismo modo que se han dado unas directrices en otros sectores, las funerarias quieren que se regule ya no solo la actuación de los profesionales, sino las medidas a llevar a cabo, imponiendo criterios de obligado cumplimiento para la ciudadanía en cuanto a la incineración, inhumación, ceremonias civiles, litúrgicas… «Entendemos el dolor de las familias que pierden a un ser querido, pero es necesaria una regulación de los actos de despedida ante la grave crisis sanitaria que estamos padeciendo», destacan. Asimismo, solicitan que se proporcione a las empresas funerarias de manera continua material epi a fin de que puedan seguir realizando su trabajo en condiciones de seguridad. «Existe una alta exposición al virus de todos los trabajadores del sector funerario, no ya por el evidente contagio con víctimas del COVID-19, sino por las actuaciones que se llevan con familiares de fallecidos o el simple hecho de acudir a centros sanitarios para la recogida de cuerpos», matiza. «Constituimos un grupo de riesgo y nos sentimos abandonados», recalcan.