Xavier Fonseca
En estos días de confinamiento hay quien considera que el tiempo es un tema menor. Al fin y al cabo, si nadie puede salir de sus casas, ¿a quién le importa si el cielo está despejado o no y si hace más o menos frío? Sin embargo, conocer las condiciones atmosféricas en estos momentos resulta más imprescindible que nunca. La meteorología puede jugar un papel fundamental en la crisis generada por el coronavirus. Aunque se desconoce cómo le afecta exactamente la temperatura, lo que parece bastante claro es que la radiación ultravioleta puede ayudar a acabar con el virus. En China se han improvisado espacios de limpieza a base de luz ultravioleta para desinfectar algunos medios de transporte públicos. Muchos autobuses se someten diariamente a baños de luz ultravioleta para acabar con el virus. «Creemos que se trata de un virus estacional y, por tanto, cuando venga un tiempo más seco y aumente la energía solar, los contagios por contacto con objetos inanimados contaminados serán prácticamente nulos», explica Carlos Pereira, profesor de Virología en la Universidad de Santiago.