«Di a luz en estado de alarma; ni los abuelos ni su hermanito conocen a Daniela, nadie pudo venir a verme»

Sandra Faginas Souto
Sandra Faginas REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Lucía Sánchez fue la primera coruñesa en dar a luz en estado de alarma en el Chuac

18 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Lucía Sánchez tiene por fin a su hija Daniela en brazos. Si los partos ya no suelen olvidarse, el de ella mucho menos, porque fue la primera coruñesa en dar a luz en estado de alarma en el Chuac. Justo cuando todos nos quedábamos confinados en casa, ella tuvo que salir corriendo de la suya en el coche, porque Daniela decidió venir al mundo el día 15, en la madrugada del sábado al domingo. «Fue muy rápido, llegué al hospital a la una y cuando no habían dado las tres ya tenía a la niña en el colo», relata Lucía, que es madre de otro niño, Lucas, de 3 años.

En estas circunstancias excepcionales, ella dice que se sintió en todo momento tranquila y apoyada; su ginecólogo ya la había advertido de que no había ningún riesgo para el bebé, así que dentro de la incertidumbre de un alumbramiento, Lucía no quiso pensar en negativo. «Si el pánico se apodera de ti es peor —apunta—, a mí me tocó parir en este contexto, pero hay que verle el lado positivo: hay mucha tranquilidad en el hospital, los bebés que han nacido están bien y aquí todos comentan lo a gusto que se trabaja así».

«Los profesionales nos han transmitido mucha seguridad y hay que confiar en ellos», indica Lucía que, de todos modos, no deja de echar de menos que su hijo Lucas no haya podido conocer a su hermanita. «Ni él ni los abuelos ni nadie de la familia han podido venir a visitarnos. De eso ya nos alertaron a mi marido y a mí nada más llegar, yo me he quedado algunas horas sola, pero es lo normal dentro de esta situación extraña», señala.

Su única preocupación es que su bebé no se contagie ni corra peligro cuando se vaya para casa, de ahí que pretenda ser muy rigurosa con las medidas de higiene, sobre todo de su hijo para evitar sustos, porque Daniela es una recién nacida sin defensas. «Estamos bien y es lo que cuenta —concluye—, eso sí, la única certeza que tengo es que a Daniela le voy a enseñar a vivir el presente, que no haga planes, ella ha nacido en una época que seguro que va a tener que estudiar».