El Gobierno podría anunciar hoy medidas adicionales para frenar contagios, como el cierre de los colegios
12 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.El número de casos de coronavirus en Portugal no para de aumentar. Ya hay 59 personas infectadas en el país, la mayoría en la región norte, aunque también en Lisboa, Coímbra, Alentejo y Algarve. Lo que más preocupa a las autoridades lusas es el rápido crecimiento de infectados en tan solo una semana y que haya varios casos de niños, adolescentes y universitarios infectados. Casi todos en Oporto, Matosinhos, Felgueiras, Lisboa y Portimão, lo que ha motivado el cierre de varias escuelas, todas las universidades y es probable que hoy, como adelantan varios medios de comunicación lusos, el primer ministro, António Costa, anuncie tras el Consejo de Ministros, y la reunión posterior, que mantendrá con los líderes de los partidos de la oposición, nuevas medidas de contingencia, como el cierre de todos los colegios e institutos y el adelanto de las vacaciones de Semana Santa.
De norte a sur de Portugal las superficies comerciales presentaban ayer la misma imagen: supermercados llenos, colas para pagar, estanterías vacías de leche, papel higiénico, latas y productos no perecederos, lo que no es habitual a mitad de la semana. La calma y los mensajes de tranquilidad difundidos por la ministra de Sanidad, Marta Temido no han surtido efecto entre los portugueses. Temido reconocía ayer, durante su comparecencia parlamentaria: «Durante los últimos días los casos han crecido y se han extendido rápidamente por el país, a pesar de las medidas de contención en la región de Oporto y de Coímbra», dijo la ministra, quien añadió: «Los próximos días se incorporarán 80 enfermeros más a la línea Saúde 24». Hasta el momento, un 60% de las llamadas al 808 24 24 24, sobre posibles casos de coronavirus, no han sido atendidas por falta de personal.
Para paliar la falta de médicos y de personal sanitario, el presidente del colegio oficial de médicos de Portugal, Miguel Guimarães, confirmó ayer, que un centenar de médicos jubilados se van a incorporar para ayudar a sus compañeros en activo mientras dure la epidemia de COVID-19.