«Lo único que pido es que me dejen pedir una excedencia e iniciar una terapia intensiva (...) para poder resucitar y tener una segunda oportunidad», decía Weinstein en sus mensajes de auxilio.Argumentaba en ellos que «muchas de las acusaciones son falsas» y que los intentos de su consejo directivo de echarle de la compañía no solo estaban mal, sino que eran «ilegales» y podían desembocar en la «destrucción de la empresa».
La mayoría de los políticos y empresarios que recibieron la petición de ayuda de Weinstein nunca contestaron. Weinstein, de 67 años, fue hallado culpable por un jurado a finales de febrero de agresión sexual en primer grado, que acarrea entre 5 y 25 años de prisión, por practicar sexo oral a la fuerza a la ayudante de producción Mimi Haley en el 2006; y de violación en tercer grado, penada con máximo 4 años, contra la aspirante a actriz Jessica Mann en el 2013.