Hallan restos de la expedición de Sarmiento de Gamboa, el Ulises gallego que imitó a Cristóbal Colón

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Las dos piezas de artillería encontradas en la ciudad Rey Don Felipe pesan unos cuatrocientos kilos y miden aproxidamente dos metros
Las dos piezas de artillería encontradas en la ciudad Rey Don Felipe pesan unos cuatrocientos kilos y miden aproxidamente dos metros Universidad Austral de Chile

Científicos chilenos localizan artillería perteneciente al primer asentamiento de la historia en el sur de América organizado por el explorador pontevedrés

11 mar 2020 . Actualizado a las 00:40 h.

La historia de Cristóbal Colón y Pedro Sarmiento de Gamboa coincide en algunos episodios. Sobre ambos se debate todavía a cerca de su posible origen gallego. En el caso de Gamboa es seguro que pasó toda la infancia y adolescencia en Pontevedra, en la vivienda de su padre, Bartolomé Sarmiento, natural de la ciudad del Lérez.

La navegación dio sentido a sus vidas y los dos lograron conquistar terrenos desconocidos durante sus respectivos siglos. Gamboa no descubrió ningún continente, pero sí que trató de encontrar uno nuevo. «Cuando llegó al estrecho de Magallanes creyó que más allá de la Tierra del Fuego existía un continente que bautizó como Tierra Australis y que trató de localizar. Realmente quiso imitar a Colón», reconoce Soledad González, del Centro de Estudios Históricos de la Universidad Bernardo O’Higgins.

Después de que Fernando de Magallanes cruzase en 1520 el paso que une el Atlántico con el Pacífico, los españoles organizaron nuevas expediciones. «Magallanes lo descubrió, pero después continuó su viaje. La tarea de reconocimiento se hizo durante las décadas posteriores por orden del rey español», señala. Los ingleses no tardaron mucho en percibir el potencial de esa ruta que conecta dos océanos. La reina Isabel le encomendó al corsario Francis Drake que repitiese la hazaña de Magallanes, algo que consiguió en 1578. A partir de entonces comenzó una carrera por hacerse con el control del estrecho en la que también acabarían entrando portugueses y holandeses.

Los  españoles consideran que Inglaterra puede llegar a establecerse en la zona y reaccionan. El virrey de Perú Francisco Álvarez de Toledo recomienda a Felipe II que organice una expedición para tratar de fortificar el estrecho y le proporciona el nombre de una persona de su confianza para liderarla; Pedro Sarmiento de Gamboa, un joven navegante, geógrafo, matemático y astrónomo que había prestado una gran servicio al virreinato descubriendo nuevas islas al oeste, como las Salomón. «Estableció contacto con los indígenas y acabó escribiendo un libro sobre ellos en cuyo prólogo confiesa su admiración por Ulises, un personaje con el que se siente identificado», explica.

La misión se complica desde el principio. La expedición que parte de Sanlúcar de Barrameda en septiembre de 1581 con 23 naves y tres mil personas se demoró dos años y medio y la tripulación fue menguando producto de las enfermedades. Finalmente solo llegó al estrecho un barco con trescientos supervivientes. «Sarmiento de Gamboa funda la ciudad de Rey Don Felipe, el primer asentamiento europeo en la historia de América del Sur. Sin embargo, se da cuenta de que la Patagonia es, en realidad, un lugar con un clima demasiado hostil. Decide abandonar a sus hombres y regresar a España en busca de ayuda, aunque por el camino lo detienen los corsarios ingleses primero y los franceses después, permaneciendo cinco años preso. Cuando llegó a España convenció a la corona para que financiase una operación de rescate, pero falleció poco después de partir frente a las costas de Portugal», apunta Soledad.

Recientemente un grupo de investigadores chilenos han descubierto restos de la expedición de Sarmiento de Gamboa, que hoy da nombre a un buque oceanográfico del CSIC, en la ciudad que él mismo fundó, Rey Don Felipe, a 50 kilómetros de Punta Arenas. «Se trata de dos piezas de artillería que se conocen come medios sacres, que pesan cerca de cuatrocientos kilos y con unos dos metros de longitud. Es un hallazgo excepcional porque contiene una inscripción sobre el año de fabricación, 1581. El armamento forma parte de la misión liderada por Gamboa para controlar el estrecho de Magallanes», reconoce Simón Urbina, investigador de la Sociedad Chilena de Arqueología, uno de los responsables del descubrimiento. «Este hallazgo nos aporta información contextual histórica muy relevante y confirma la tesis del primer asentamiento en este lugar de la Tierra en una época en la que la geopolítica y el control de los pasos marítimos era tan importante», asegura Urbina.