Un ensayo clínico realizado en Santiago y Vigo prueba la eficacia de la doble terapia antiviral, frente a la triple
10 mar 2020 . Actualizado a las 10:24 h.Un fármaco menos para tratar a los pacientes con VIH. Si desde 1996 la pauta común que se sigue es la triple terapia con antivirales, un ensayo clínico realizado durante 96 semanas con la participación del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (Chus) y del Álvaro Cunqueiro de Vigo (Chuvi) ha demostrado que se obtiene el mismo beneficio con solo dos fármacos administrados en un único comprimido. Se trata de un avance de relevancia, ya que el nuevo tratamiento no solo supone un ahorro económico, sino que también se ve reducida la toxicidad a la que se ven expuestas las personas que reciben la medicación, lo que redunda en una mejor calidad de vida.
Así al menos lo ha destacado el especialista en enfermedades infecciosas del Chus Antonio Antela, que ha dado a conocer el nuevo avance en una reunión organizada por ViiV Healthcare en A Coruña. «Lo realmente novedoso no es la administración en un único comprimido, que ya se hacía también con la triple terapia, sino que con una doble terapia se han conseguido los mismos resultados, lo que desafía el paradigma que se ha seguido para tratar la infección por VIH desde el año 1996».
Es más, la administración de un comprimido que integre la doble terapia fue aprobada en Galicia el pasado mes de enero y constituye ya una opción terapéutica para las aproximadamente 7.000 personas que se estima que viven con el VIH en la comunidad. A Coruña y Pontevedra son las comunidades con una mayor incidencia.
Esta alternativa farmacológica, que se prepara en las farmacias hospitalarias, es eficaz tanto para los pacientes que inician por primera vez el tratamiento como para aquellos que ya lo reciben y que tienen una carga viral indetectable. Solo existen dos excepciones para su aplicación. «No es aconsejable administrarlo cuando el paciente tiene una carga viral altísima, por encima de las 500.000 copias del virus, o, en el caso de los pretratados, cuando ha fracasado alguno de los dos tratamientos que empleamos y les han generado resistencias», advierte Antonio Antela.
Los medicamentos que se emplean en la nueva terapia son un inhibidor de la integrasa y otro de la retrotranscriptasa. «Estamos ante dos fármacos que actúan a distinto nivel del ciclo del VIH. Uno de ellos es conocido desde principios de los 90 y sabemos de su eficacia y que es un antirretroviral muy bien tolerado. Y dolutegravir, un inhibidor de la integrasa, es uno de los fármacos más recientes con alta eficacia, unida a una buena tolerabilidad», precisa el especialista.
El nuevo régimen antirretroviral ha demostrado una eficacia similar a los tratamientos de referencia con los que se ha comparado y ya está recomendado por las principales guías clínicas para el VIH, tanto internacionales como nacionales.
«Supone un ahorro en medicamentos y una mejor calidad de vida para el paciente»
«Reducir de tres a dos los antivirales en el tratamiento contra el VIH supone, por un lado, un menor coste y, por otro, evita a los pacientes una posible toxicidad de los fármacos», destaca Antonio Antela, especialista de enfermedades infecciosas del Chus. Este último aspecto es muy importante porque contribuye a mejorar la calidad de vida de las personas con el virus, que es uno de los grandes objetivos. De hecho, uno de los retos que se ha marcado la OMS es que el 90 % de los afectados tengan una buena calidad de vida.
«Esto se podría conseguir gracias a fármacos más amigables desde el punto de vista de la tolerabilidad», subraya Antela, quien también destacó la participación de los hospitales de Santiago y de Vigo en lo que supone un antes y un después en la terapia contra el VIH.
