Un banco situado en la ladera del monte San Lois está atornillado a una losa sobre la que se aprecia un grabado
21 feb 2020 . Actualizado a las 21:11 h.En esa peculiar competición por encontrar el mejor banco del mundo, el situado en el monte San Lois de Noia bien podría colarse entre los más votados, si no fuera por que está plantado justo encima de un petroglifo. Eso sí, con unas vistas envidiables a la ría.
Hace cerca de un año que el Concello de Noia instaló el asiento en ese lugar, pero ha sido ahora cuando el colectivo A Rula ha hecho pública su situación tras percatarse de la existencia de un gravado en la losa sobre la que se atornilló el banco. La erosión y su situación a ras de suelo complica la visión de los grabados, cinco círculos concéntricos, quizá por eso el alcalde noiés, Santiago Freire, sostiene que en ese conjunto rocoso no hay nada.
Ciertamente, escudriñando en la piedra pueden apreciase unos dibujos, aunque, si efectivamente se trata de petroglifo, no está inventariado en el catálogo de bienes patrimoniales del municipio. Con todo, expertos en la materia no tienen dudas de que se trata de un grabado rupestre y apuntan que, en cualquier caso, la zona en la que se encuentra está dentro del ámbito de protección del castro de San Lois, un yacimiento que sí está catalogado y que, por tanto, exige la autorización de Patrimonio para cualquier intervención en su entorno.
El alcalde explicó que no había constancia de la existencia de un petroglifo y aseguró que se realizarán las consultas pertinentes con Patrimonio. Si se confirma que existe algún tipo de protección, el banco se retirará.
