La «desconferencia» llega a Galicia: los asistentes votan antes los temas sobre los que van a debatir
02 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Hasta 57 abogados de Galicia celebraron ayer en Santiago la primera conferencia Legal Open Space, también llamada desconferencia. No hay programa hasta que los asistentes hacen uno. Y eso hicieron, el público votó con unas pegatinas distintas propuestas sobre las que debatir y luego cada uno se sentó en las charlas que quiso. Esta técnica pionera hunde sus raíces en los años 90, cuando los informáticos de Silicon Valley se tiraban los trastos respecto a si Internet debía ser en código abierto, el open source, y todo gratis o cerrado. El gurú de Silicon Valley Tim O'Reilly que popularizó el código abierto, la web 2, las ferias maker y en el 2003 lanzó la idea de la desconferencia. Ese año organizó la Foo Camp, un evento en que no se establecía un programa por adelantado, sino que es creado por los asistentes en directo. «Le pedimos a nuestra comunidad de frikis alfa que nos enseñasen en qué habían trabajado», relata O’Reilly en su libro La economía WFT.
Las desconferencias saltaron el charco y llegan a Galicia de la mano de la letrada Bárbara Román, del bufete Nolegaltech. «El concepto es el mismo. Estuvo de moda en Estados Unidos y está llegando a Europa. Hay gente que está montando negocios después de compartir una charla en un open», dice. El primer Open Space para abogados se celebró ayer en el Área Central de Santiago. Cada entrada costó 20 euros.
Esta fórmula tiene su propia liturgia como la regla de oro de los dos pies, que establece que cualquier asistente puede moverse de una charla aburrida a otra. Las ideas no elegidas pueden tratarse en una esquina en petit comité. En la sesión de ayer se eligieron 15 temas con 159 votos. Cada asistente tenía derecho a tres votos y adhirió unas pegatinas de color a las cartulinas con cada tema escrito y colgadas en un panel. «La gente está muy contenta y los temas de las charlas muy variados. En el Colegio de Abogados de Oviedo están pensando hacer la segunda edición allí», dice Román.
Entre los temas más votados por los asistentes estuvieron la gestión del estrés, un debate crítico sobre los colegios de abogados, la agilidad en la profesión, la captación de clientes, la ultraproductividad o el márketing digital. Entre los asistentes había expertos en automatizar impuestos, estudiantes de máster de Derecho y veteranos con más de 20 años de ejercicio. El laboralista Fabián Valero propuso una charla sobre liderazgo en despachos: «Hubo temas muy interesantes y las conversaciones e ideas fueron fluidas». Le impresionaron el estado del legaltech en España, el liderazgo en los bufetes, el MBA para firmas de abogados y la gestión de despachos para convertirlo en negocio.
La secretaria de Avogados Novos de Vigo, Ester Alonso, propuso debatir la perspectiva de género en la abogacía y la mejora de la productividad. Participó en otra de compañerismo y colaboración. «Fue un evento abierto, fantástico y novedoso, dinámico en el que todos participamos y aprendimos. Sacamos conclusiones para mejorar la eficiencia del despacho y la sociedad», dijo.