Olav Bjørshol confesó que fue él quien encontró a su hijo poco antes de morir
16 ene 2020 . Actualizado a las 01:05 h.El padre de Ari Behn, exmarido de la princesa Marta Luisa de Noruega que se suicidó el pasado día de Navidad, pasó con él las últimas horas en su casa y fue quien encontró el cadáver, según reveló en una entrevista. «Fui yo quien lo encontró. Estoy muy agradecido por haber podido estar con él», dijo Olav Bjørshol a la revista Se og Hør. La idea inicial era que Behn pasase las Navidades con sus hijas junto a los reyes de Noruega, pero debido a su estado de salud optó por hacerlo con sus padres, aunque al final también canceló ese plan y se quedó en su casa en Lommedalen, a las afueras de Oslo.
Bjørshol decidió entonces acercarse a visitarlo en Nochebuena y el día de Navidad para estar con él. «Ari no estaba solo cuando decidió terminar con su vida. Parecía que el último día encontró una especie de paz», señaló. La familia decidió enseguida dar a conocer el motivo de la muerte para «evitar especulaciones» y con la «esperanza» de ayudar a otras personas con problemas mentales, aseguró a la revista su madre, que desveló que Behn había recibido ayuda profesional los últimos años.
Conmoción en Noruega
La muerte de Behn ha conmocionado a Noruega y en las últimas semanas ha habido numerosas muestras de duelo de familiares, políticos, artistas, famosos y ciudadanos comunes, que llenaron de flores y velas la plaza del Palacio Real de Oslo. Su funeral, celebrado el pasado día 3 en la catedral de Oslo, contó con la presencia de la familia real al completo y de cientos de ciudadanos anónimos, por deseo de la familia, además de ser retransmitido en directo por la televisión pública NRK.
Maud Angelica, la mayor de sus tres hijas; sus padres y hermanos pronunciaron varios emotivos discursos en su recuerdo. Behn, de 47 años, estuvo casado con Marta Luisa entre el 2002 y el 2017, cuando protagonizó el primer divorcio en la Casa Real noruega en dos siglos.
El propio Behn, que tenía la tutela compartida de sus tres hijas, confesó en varias ocasiones sus problemas de depresiones y en su último libro, publicado hace un año, relató lo dura que había sido la separación de Marta Luisa y reflexionó sobre la muerte, a la vez que se despedía de sus seres más queridos. Las cenizas de Behn serán depositadas en el cementerio de Nuestro Salvador de Oslo, según informó su representante al diario VG.
El «infierno» de Ari Behn
Noruega está absolutamente conmocionada por la trágica muerte de Ari Behn, exmarido de Marta Luisa y padre de sus tres hijas: Maud Angelica, de 16 años; Leah Isadora, de 14; y Emma Tallulah, de 11. Su representante Geir Håkonsund fue el encargado de dar la triste noticia. «Con gran dolor en el corazón, los familiares más cercanos de Ari Behn informamos hoy de que se ha quitado la vida. Pedimos respeto a nuestra vida privada de ahora en adelante», rezaba el escueto comunicado. Divorciado desde el 2016 de la primogénita del rey Harald de Noruega, que siempre ha sido un verso suelto dentro de la familia real, el escritor y pintor ya dio muestras de sus excentricidades durante su relación con ella, algo que provocó críticas dentro de una institución tan anclada en la tradición como puede ser una monarquía.
«No soy un hombre feliz», confesaba hace diez años a la revista gratuíta noruega Massiv. «Tengo tres hijas a las que adoro, y ellas me ayudan a levantar el ánimo, pero en general soy un depresivo crónico, y parece que cada día es peor y peor. Ellas son lo mejor del mundo, pero reconozco que soy un compañero de viaje muy difícil. Creo que más tarde o más temprano se verán obligadas a echarme de casa a patadas», adelantando lo que se produciría años después. «Tengo pequeñas crisis a diario. El problema más pequeño y más trivial puede hacerme saltar hasta golpearme con el techo. Tengo una crisis nerviosa por lo menos una vez al día», confesaba. «Voy a morirme solo, sin ninguna compañía. Solo y amargado. Es como si nunca fuera capaz de atarme a algo del todo», añadía, unas palabras que en la actualidad parecen casi una premonición de su muerte.
En octubre del 2018 Ari Behn contó en un libro titulado Infierno, cómo había vivido la separación de su mujer. Presentada como «una novela con cuadros». «Puestos en lo peor, soy un payaso. Visto con más clemencia, soy una persona cualquiera y un actor. Para muchos, soy un loco», decía en la presentación de su obra en la que reconocía que sufría depresión y alcoholismo. «Es un gran cambio en mi vida. Se puede comparar con una muerte», decía sobre su divorcio, que resumía con adjetivos como «dolor, sufrimientos, extrañeza, tristeza y pérdida». En los últimos años se había centrado en su faceta como pintor, y esta es su última publicación en Instagram, del 23 de agosto.
En los últimos meses se le vio junto a Marta Luisa y su polémico novio, el chamán Derek Verret, relación por la cual estuvo a punto de ser expulsada de la familia real este verano.
La gota que colmó el vaso de la paciencia de los reyes fueron las imágenes que colgó la bloguera Marna Haugen, con Ari Behn metiendo la cabeza entre sus pechos tras una cena. Pero no había sido el único «error» por el que él mismo aseguró que «la reina Sonia me asesinaría si pudiera», en una entrevista concedida a la revista Vanity Fair en el 2013, cuando aún estaba casado con Marta Luisa.
Antes casarse Behn ya era un irreverente escritor de origen danés que había tenido una infancia complicada tras el divorcio de sus padres, cuando solo tenía nueve años. «Mi madre se casó con su mejor amigo. Mi padre, a su vez, contrajo matrimonio con la exmujer de ese señor. Hicieron, literalmente, un intercambio de parejas. Y nos comunicaron su decisión el día de Nochebuena, porque consideraron que como estábamos todos juntos era un buen momento», explicaba. Tras casi 25 años separados sus padres se reencontraron en su boda con Marta Luisa y se volvieron a casar, casi al tiempo de que se descubriese que su padre biológico era otro hombre. «Era divertida, inteligente y espiritual, y esa parte me intrigaba muchísimo», aseguraba de Marta Luisa cuando la conoció en casa de su madre, donde la princesa acudía para aprender una extraña técnica de fisioterapia poco ortodoxa. Él mismo desvelaba que había sido muy complicado que los reyes aceptasen su relación. «Pasó casi un año y medio hasta que aceptaron la situación en palacio y pudimos anunciar el compromiso», explicaba, asegurando además que si no hubiese sido princesa se había casado con ella a los quince días.
A lo largo de los años que estuvo con Marta Luisa, Ari Behn protagonizó varios momentos que provocaron el escándalo en el seno de la casa real Noruega. De deambular como un mendigo por las calles de Londres, asegurar que votaba al Partido de los Trabajadores y era de izquierdas, acudir a tertulias televisivas, esnifar cocaína en un documental y hasta a tener su propio programa de televisión en el que se disfrazó de drag queen por Barcelona. Fue en el año 2010, cuando grababa un programa del estilo Callejeros. Recorrió las calles del Raval junto a Carmen de Mairena. «Soy un hombre de teatro, pensé que con un poco de maquillaje escandaloso podría quedar muy bien. Pasará mucho tiempo hasta que vuelva a travestirme», dijo tras la polémica.
Las declaraciones de los dos sobre su relación abierta tampoco sentaron demasiado bien a los reyes: «Nuestro amor es más fuerte que nunca, pero nos permitimos flirtear con otras personas. En este sentido, somos muy libres. Si no, sería espantoso», aseguró. «Lo hemos intentado todo [para salvar el matrimonio] pero no podemos recuperar lo que tuvimos», eran las palabras con las que anunciaba Marta Luisa su separación.
«La vida no va siempre sobre ruedas, tanto Ari como yo lo hemos experimentado. Pero nunca ha estado más claro que ahora, cuando nos ha hecho alguna travesura que no habíamos visto venir. Nos separamos, terminamos nuestro matrimonio, pero mantenemos la custodia compartida», aseguraba Ari en ese momento.
La vinculación de Ari Behn con España
Tras confirmarse su ruptura con Marta Luisa, que se anunció en el año 2016, el escritor se refugió en España. En octubre del 2016 colgaba un vídeo montando a caballo que titulaba: «Encontrándome a mí mismo con Don Alfonso», refiriéndose Alfonso López de Carrizosa.
En el 2017 regresaba para una jornada de caza, una foto por la que fue muy criticado.
Su encontronazo con Kevin Spacey
La muerte de Ari Behn casi coincide en el tiempo con un misterioso vídeo de Kevin Spacey, que volvió a ponerse en la piel de Frank Underwood, su personaje en House of Cards, para felicitar la Navidad. Precisamente el escritor y pintor habló de su encuentro con el actor, en el que también intentó propasarse con él. «Tras el espectáculo [estaban en un concierto en el Oslo Spektrum] estábamos conversando, él estaba sentado junto a mí. Después de cinco minutos, me dijo: ‘´Oye, salgamos a fumar un cigarrillo’´, y mientras me lo decía me tocó la entrepierna por debajo de la mesa», detallaba hace poco más de dos años, cuando se destaparon los escándalos contra Space. Aunque él contaba como en broma, recordando que «fue una noche genial... él es un actor brillante».
Las reacciones a la muerte de Ari Behn
Las tres hijas de Ari Behn asistían a la misa de Navidad junto a su madre, su novio y el resto de la familia real poco antes de que se conociese la fatal noticia. Los reyes Harald V y Sonia expresaron en otro comunicado su «gran pena» por la muerte de Behn, una parte «importante» de la familia real durante muchos años y del que conservan «buenos recuerdos», a la vez que lamentaron que sus nietas hayan perdido a «un gran padre».
«Para nosotros Ari era un buen amigo, un familiar querido y un tío fantástico con el que compartimos grandes y pequeños momentos en la vida», lamentaron el príncipe heredero Haakon y su esposa, la princesa Mette-Marit.
En las últimas horas los alrededores del Palacio Real en Oslo se han llenado de velas que ciudadanos anónimos han ido depositando allí para homenajear a Ari Behn.