Cristina Chacón: «En el núcleo de la asistencia personal están los derechos humanos»

Tamara Montero
tamara montero SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

ANGEL MANSO

Es periodista, feminista y activista por los derechos de las personas con diversidad funcional

05 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

«Para mí es el futuro de las personas con diversidad funcional, y de hecho no concibo mi vida sin ella a día de hoy». El sol todavía calienta en la casa de Cristina Chacón mientras va dibujando con su discurso un futuro en el que pesa, sobre todo, un concepto: el de autonomía. Y esa autonomía, para las personas con diversidad funcional -prefiere ese término al de persona con discapacidad- tiene un nombre: asistencia personal.

Cristina Chacón hace natación y boxeo. Y también es periodista. Y feminista. La carrera la estudió en Valladolid, y ahora ha vuelto a A Coruña para terminar el trabajo de fin de grado, que ha presentado hace unos días. Así que ya es graduada. Allí, en Castilla y León, «conocí la figura del asistente personal y fui una de las afortunadas y pioneras que inauguró el servicio de asistencia personal en la comunidad» mediante Predif. «Te da autonomía, y ya no solo para transcribir o coger apuntes, sino para llegar a la biblioteca y no tener que andar pidiendo favores como “¿me coges este libro?”, “¿me apartas esta silla?”, “¿me enchufas esto?”. Son detalles de los que la gente no se da cuenta».

También ha solicitado un cambio de PIA -que es el plan de intervención que se establece tras ser valorado como dependiente- para pasar a tener la ayuda para la asistencia personal, una prestación para contratar al asistente que en la actualidad disfrutan algo más de un centenar de personas en Galicia, y que esta periodista ha solicitado para cubrir sus necesidades en la vida diaria.

Cristina Chacón reclama que exista una ley de asistencia personal dentro de la dependencia. Lo explica según lo ha vivido. «Es el futuro, pero a día de hoy, a nivel estatal, tal como está planteada es elitista en cierta forma, porque si no tienes dinero no te lo puedes pagar», explica. «Ahora las ayudas van un poco en función de quien gobierna, y eso debería dejarse a un lado y tener unas ayudas básicas garantizadas».

Para Chacón esto es fundamental. «En el fondo, en el núcleo de la asistencia personal están los derechos humanos», y por eso la creación de las becas Reina Letizia para la inclusión (que ha solicitado) son tan positivas, «para que empecemos a tener recursos para nosotros sin tener que contar con ayudas familiares, de amigos, de parejas o posibles parejas. Para poder tener nuestra propia vida» y la oportunidad, o más bien el derecho, de tomar sus propias decisiones «y acertar o equivocarme». Quiere hacerlo por sí misma. Que la familia sea un apoyo, y «no mi opción principal». Vivir su propia existencia: hacer un máster, tener vida laboral. Viajar. «Marcar mis tiempos y tener mi voz, que es una de las razones por las que me hice periodista. Cuando de pequeña me sentía tan bicho pensaba que si me ha tocado ser tan diferente será porque tengo que contar algo importante al mundo, por la forma en la que me ha tocado vivir».

Esta periodista tiene parálisis cerebral, una condición atravesada por el estigma. «Cada discapacidad y cada persona es un mundo. Puedes tener otra chica con parálisis cerebral y su nivel de afectación, su historia de vida y su entorno van a ser distintos, con lo cual sus capacidades serán distintas».

Otro estigma que rompe Cristina: las personas con diversidad funcional pueden aportar mucho a la sociedad en todos los niveles, «y nos tienen como si fuésemos bichos raros». Pero «siempre aparece alguien que no ve la diferencia y te quedas con esa persona».

-¿Hay condescendencia?

-Sí. Yo siempre lo digo. Tener una discapacidad no es fácil, pero yo al mismo tiempo me siento afortunada. Es fastidiado tener que depender de alguien, pero aprendes a ver la vida desde otro punto de vista, y la gente que está a tu alrededor se enriquece y aprende.

El paternalismo llega a veces, «pero por desconocimiento. No sé quién creó el concepto de normalidad, pero es algo inventado. Lo que hay que hacer en sociedad es aprender a aceptar la diversidad, del tipo de que sea, porque la diversidad enriquece, y quien no sepa aceptar eso tiene un problema». Salirse de la norma es bueno, y Chacón defiende que la asistencia personal facilita a las personas estar dentro de la sociedad «y no en los márgenes, y sentirte continuamente agradecida por tener tus derechos».