La borrasca Daniel es solo un aperitivo de lo que está por llegar. Entre el miércoles y el viernes se esperan vientos muy fuertes
16 dic 2019 . Actualizado a las 21:43 h.El informe climatológico publicado por MeteoGalicia sobre el balance del otoño confirma que ha sido una estación muy húmeda. Durante los últimos tres meses ha llovido un 53 por ciento más de lo habitual. Galicia se ha convertido en parada obligatoria de los trenes que transportan ciclones extratropicales y que cruzan el Atlántico desde octubre. A medio plazo no se aprecian cambios significativos. Más bien todo lo contrario. Esta semana se presenta muy complicada, con hasta tres episodios de temporal.
La primera borrasca afecta este lunes a la comunidad con chaparrones, granizo y nieve. Tiene nombre propio, Daniel, tras haber sido bautizada por la Agencia Estatal de Meteorología. Se trata de un centro de bajas presiones situado sobre la Península. Sus vientos de componente norte arrastran aire gélido, que son fuente de inestabilidad y permiten que desciendan las temperaturas máximas y mínimas de forma notable, además de la cota de nieve, que bajará hasta los 500 metros al final de la jornada. La Aemet ha activado un aviso naranja en las montañas de Lugo y Ourense por espesores de nieve de hasta veinte centímetros.
En la costa seguirá la situación de mar combinada con olas de siete metros. Hay, además, avisos en el centro y sur de la provincia lucense por acumulaciones de lluvia de hasta 40 litros por metro cuadrado en 12 horas. El martes será una jornada de transición. Habrá nubes y claros con posibilidad de chaparrones en la mitad norte.
La tregua durará solo unas horas porque el miércoles el tiempo vuelve a empeorar. Otra borrasca profunda, con una presión mínima central de 965 milibares dejará su huella en Galicia en forma de lluvias intensas y fuertes vientos. En las provincias atlánticas, las rachas podrían superar los cien kilómetros por hora. El frente que barrerá la comunidad será bastante activo y, por tanto, volverán a registrarse grandes acumulaciones de agua, especialmente en la mitad oeste.
Los modelos apuntan a que el jueves todavía podría complicarse más la situación. Un nuevo sistema de bajas presiones pasará casi rozando el noroeste de la comunidad. Si se confirma esta previsión, el viento arreciará intensamente allí donde no suele ser tan habitual, con rachas huracanadas. Las cifras podrían llegar hasta los 140 kilómetros por hora.
Si se cumple este escenario se activarán importantes avisos de forma generalizada. Todo ello acompañado, como siempre, de una precipitación intensa y persistente. En apenas diez días se van a recoger más de 400 litros por metro cuadrado, elevando el riesgo de inundaciones y desbordamientos.
Chorro polar
Como la lluvia lleva siendo noticia durante meses en Galicia, el verdadero protagonista de los próximos días será, sin duda, el viento. Ahora mismo la corriente en chorro no solo está moviéndose más al sur de lo habitual sino que el viento que le acompaña sopla con mucha fuerza. Y cuando el chorro polar desciende de latitud, también lo hacen las borrascas. Este panorama atmosférico explica por qué los ciclones están pasando tan cerca de la costa gallega.
