Medicamentos y remedios que no sirven para nada

Uxía Rodríguez Diez
UXÍA RODRÍGUEZ REDACCION

SOCIEDAD

FarmaCiencia ha elaborado una guía que repasa los tratamientos que funcionan y los que no para las 19 dolencias menores más comunes en la población

14 nov 2019 . Actualizado a las 09:23 h.

«Algunos de los medicamentos más empleados y que muchos consideran efectivos no siempre cuentan con pruebas que respalden su uso, o incluso que según los ensayos clínicos, no tienen mayor efectividad que el placebo», es la premisa de la que parte la guía elaborada por FarmaCiencia. Un repaso a la bibliografía existente sobre 19 de las dolencias menores más comunes y enfocada tanto para farmacéuticos como para otros profesionales sanitarios. En ella se revelan datos tan relevantes como la limitada función de los antitusivos y su elevada peligrosidad para los bebés.

«Los mucolíticos para los niños no solo no son efectivos, pueden llegar a ser peligrosos en menores de dos años», asegura Roi Cal, vicepresidente de FarmaCiencia, que recuerda que muchas veces tomamos medicamentos que no sirven para nada. «Puede haber fármacos que sean útiles para algo, pero que se estén utilizando para otras indicaciones», explica el farmacéutico.

No solo se habla del tratamiento farmacológico para esos problemas, también se destierran mitos como la eficacia de la manzanilla para la conjuntivitis o las gasas calientes para los orzuelos.

«No nos podemos dejar guiar por esas pastillas o jarabe que le va bien a la vecina o por el anuncio de la televisión», recalca.

Tos aguda: la mayoría de los antitusivos no funcionan

La tos productiva es un mecanismo fisiológico de defensa. Algunos de los antitusivos más empleados no han demostrado mayor eficacia que el placebo. En pediatría no existen medicamentos seguros para los menores de dos años.

FUNCIONA

De todos los antitusivos, la cloperastina, es la que posee mejores ensayos que respalden su eficacia. Al igual que la levodropropizina. Ambos deben emplearse solo en niños mayores de dos años con tos seca. La miel se ha usado tradicionalmente como remedio para el alivio de la tos. Es de los pocos productos naturales respaldados por la ciencia, aunque solo debe usarse en mayores de un año por riesgo de botulismo.

NO FUNCIONA

La codeína, considerada desde hace años el antitusivo más eficaz, no alivia la tos aguda producida por gripe o resfriados. No debe usarse en menores de 12 años. Otro de los más empleados, el dextrometorfano, es completamente ineficaz en pediatría. La combinación de antihistamínicos con descongestivos solo aumenta el riesgo de efectos secundarios. Más de lo mismo con la mepifilina, no hay evidencia que respalde su uso. Los descongestivos por vía oral son los que mayor riesgo entrañan para la población pediátrica. Se recomienda evitarlos en menores de siete años. No se puede apoyar la utilización de la hiedra.

Acné: ni productos de lavado, ni exposición solar

El acné es muy común y afecta aproximadamente a un 85 % de los adolescentes. En esas edades es más común en los hombres, el acné adulto se da más en mujeres. El consumo de chocolate no es parte del problema.

FUNCIONA

Los retinoides tópicos son la opción mejor valorada. Son derivados de la vitamina A y capaces de reducir el número de lesiones inflamatorias. El adapaleno es el fármaco mejor tolerado. Además, los antibióticos orales han mostrado ser una opción eficaz para su tratamiento. La terapia hormonal funciona en mujeres. Varios ensayos clínicos hacen que sea recomendable el uso de anticonceptivos orales. Existen algunas pruebas de baja calidad de ensayos individuales de que la dieta de baja carga glucémica, el aceite del árbol del té y el veneno de abeja podrían reducir las lesiones totales del acné vulgar.

NO FUNCIONA

La efectividad del uso de productos de lavado es muy limitada. Las terapias lumínicas también son ineficaces. No hay pruebas que relacionen su aparición con alguna deficiencia de los hábitos higiénicos. El consenso actual descarta su asociación con el consumo de chocolate. Actualmente se desaconseja el tratamiento con antibióticos tópicos. No se puede apoyar el uso de plantas medicinales o acupuntura.

Diarrea: la rehidratación es la recomendación general

La diarrea se define como la disminución de la consistencia o el aumento de la frecuencia de las evacuaciones intestinales al menos más de 3 diarias. Es un proceso autolimitado que no requiere un tratamiento específico.

FUNCIONA

El paciente debe tomar desde el primer momento soluciones de rehidratación oral con agua, glucosa y sales. El uso de probióticos es la mejor opción hoy en día. Se ha demostrado que estas cepas funcionan, incluso en niños: Sacchromyces boulardii (250mg en desayuno y cena), Lactobacillus rhamnosus GG (1010 UFC en desayuno y cena). La loperamida está indicada en diarrea por intoxicación (2 mg después de cada deposición). Racecadotrilo: múltiples estudios han demostrado su efectividad en el manejo de la diarrea aguda en niños y adultos. La suplementación oral con zinc reduce la duración y la gravedad.

NO FUNCIONA

De forma rutinaria se recomienda seguir una dieta blanda; sin embargo, esta medida no está respaldada por estudios de eficacia clínica. El uso de antibióticos no está indicado de forma rutinaria en el tratamiento de la diarrea aguda. Para los absorbentes intestinales (carbón activo, metilcelulosa) no hay estudios que demuestren su utilidad. No existe evidencia para recomendarlos.

Insomnio: modificar conductas y el estilo de vida, antes que las pastillas

El insomnio es el trastorno del sueño más frecuente y constituye un problema de salud pública.

FUNCIONA

Lo primero que hay que hacer es llevar una higiene del sueño: horarios regulares, mantener condiciones ambientales adecuadas para dormir, evitar comidas copiosas por la noche, dormir siestas no superiores a 30 minutos, practicar rutinas de relajación antes de acostarse. Otro tipo de intervención es la psicoterapéutica. En caso de tratamiento farmacológico, los hipnóticos son el medicamento de mejor elección. Deben tener una duración no superior a 14 días y estar seleccionados en función del paciente. La difenhidramina y la doxilamina, aprobados en España como hipnóticos que no necesitan prescripción, presentan propiedades antihistamínicas primarias, por lo que pueden tener un papel en el tratamiento a corto plazo del insomnio en adultos jóvenes. La melatonina está comercializada como suplemento dietético para reducir la latencia del inicio del sueño. Funciona en el insomnio tipo jet lag. Se debe mantener el tratamiento un cierto tiempo; no está indicado su uso puntual.

NO FUNCIONA

La valeriana no sería útil en el tratamiento del insomnio primario. Disminuye el tiempo de latencia del sueño, pero no de forma significativa en el insomnio ocasional.