Este informe vinculó la cepa encontrada en las instalaciones investigadas con los productos elaborados y las 193 personas intoxicadas.
Aunque la actividad de las empresas investigadas se centraba en España, cuatro miembros de una familia alemana resultaron intoxicados, al igual que un ciudadano de nacionalidad inglesa que se encontraba en Francia.
Por ello, al existir estas conexiones internacionales, la Guardia Civil ha contado con la colaboración de Europol en los registros domiciliarios, así como en el análisis de las comunicaciones.