Nuevo caso sorprendente: una borrasca formará una ciclogénesis y otra tormenta tropical

SOCIEDAD

Xavier Fonseca

La Aemet ya ha activado avisos en Galicia para este viernes por lluvias intensas que llegarán desde el norte y el sur

30 oct 2019 . Actualizado a las 17:27 h.

A pesar de que el extraordinario huracán Pablo ya es historia, la actividad ciclónica en el Atlántico se mantiene desatada. En estos momentos se está gestando una nueva situación meteorológica de lo más sorprendente. Hay una borrasca en medio del océano con una presión mínima central de unos 983 milibares. En las próximas horas se dividirá en dos. La primera tomará una trayectoria hacia el norte y comenzará a profundizarse de forma intensa. Tanto, que entre el viernes y el sábado experimentará un proceso de ciclogénesis explosiva, al perder más de 20 milibares en 24 horas.

Galicia notará los efectos de esa borrasca explosiva el viernes con lluvias intensas. La Agencia Estatal de Meteorología ha activado avisos amarillos en el litoral de A Coruña y en toda la provincia de Pontevedra. Se podrían acumular al menos 50 litros por metro cuadrado en doce horas. La presencia de esa profunda borrasca al oeste de Irlanda también se notará por medio de los vientos intensos de componente sur y fuerte oleaje. El sábado será otra jornada con lluvias generalizadas.

Además, la posición del potente sistema de bajas presiones creará un corredor del noroeste que desplazará aire gélido de origen polar. Esto permitirá que la atmósfera sea inestable, con chaparrones acompañados de granizo y aparato eléctrico y también que desciendan de forma progresiva las temperaturas, tanto las máximas como las mínimas. Se espera incluso que pueda nevar en las zonas de montaña de Lugo y Ourense. Y parece que la lluvia y el ambiente frío vienen para quedarse hasta nuevo aviso. Los modelos meteorológicos están indicando que la próxima semana llegarán nuevas borrascas a Galicia.

¿Nueva tormenta tropical?

El segundo sistema de bajas presiones que sale de la borrasca no quiere ser menos que la ciclogénesis explosiva y, según el Centro Nacional de Huracanes, existe una probabilidad de al menos un 50 por ciento de que se transforme en una tormenta tropical en las próximas horas.

La borrasca tomará una trayectoria hacia el sur y se situará cerca de las Azores, donde procedería con la metamorfosis. Si se cumple esta previsión actuaría de la misma forma que Pablo, que el viernes pasado también pasó de borrasca a ciclón tropical al oeste del archipiélago portugués.

Salvo sorpresa, la tormenta tropical acabaría deshaciéndose cerca de las Azores y no está previsto que pueda ascender hacia el norte ni convertirse en huracán, como el caso de Pablo, que fue lo que realmente hizo que se tratase de un caso inédito en la era satelital. En Galicia se notaría la formación de ese sistema de bajas presiones tropical con un ligero aumento en la cantidad de lluvia prevista para el viernes. Varias líneas de precipitación llegarían a la costa sur de la comunidad y se unirían a las lluvias asociadas a la borrasca situada en Irlanda.