El Sunday Times reveló hace unos meses que el palacio de Buckingham, residencia de la familia real, evaluaba la posibilidad de que los duques residieran en algún lugar de África. Pese a que poco después de la casa real británica se desmintió esa información, parece que ahora esos planes podrían estar mucho más cerca de hacerse realidad.
Hace unas semanas el príncipe Harry decició emprender acciones legales contra varios medios de comunicación ingleses por varias publicaciones relacionadas con Meghan Markle. El nieto de Isabel II, que perdió a su madre Diana de Gales cuando solo tenía doce años, teme que la historia de su madre se repitiese con su esposa. «He visto lo que pasa cuando alguien a quien quiero es mercantilizado hasta un punto en el que no es tratado ni visto como una persona real. Perdí a mi madre y ahora veo cómo mi esposa cae víctima de estas mismas fuerzas poderosas». Así de claro y con estas crudas palabras habló el príncipe Harry, harto ya de la campaña de desacreditación que según él, sufre su mujer, Meghan Markle, en los últimos tiempos. Su mayor temor es que «la historia se repita». Por eso los duques de Sussex han tomado acciones legales contra el diario Mail on Sunday, que recientemente publicó una carta que la duquesa habría escrito a su padre, con el que no tiene relación. «Hay un coste humano a esta incansable propaganda, específicamente cuando se sabe que es falsa y maliciosa», explicaban en un comunicado, argumentando las razones que les han llevado a tomar esta drástica decisión. En él subrayaban que creen en la libertad de prensa pero afirman que Meghan «se ha convertido en una de las últimas víctimas de los tabloides británicos, que llevan a cabo campañas contra individuos sin pensar en las consecuencias».