Angelina Jolie abandona provisionalmente el cine para dedicarse en exclusiva a la educación de sus hijos

maría estévez LOS ÁNGELES / COLPISA

SOCIEDAD

PETER NICHOLLS

«No quiero perderme nada de ellos en este momento», aseguró la actriz en la presentación de la nueva entrega de «Maléfica»

17 oct 2019 . Actualizado a las 16:59 h.

En plena promoción de Maléfica: Maestra del mal', Angelina Jolie, de 43 años, reconoce a los medios que los últimos años de su vida no han sido fáciles y que ahora quiere dejar su carrera aparcada para dedicarse a tiempo completo a la educación de sus seis hijos. En esta secuela -la original fue otro taquillazo de Disney-, la actriz se convierte en un hada del reino de Ulstead, en una cinta cargada de mensajes positivos a favor de la tolerancia y que tiene en su reparto a otras dos estrellas de Hollywood: Michelle Pfeiffer y Elle Fanning. Positiva y orgullosa, Jolie habla feliz de un trabajo que, todo apunta, será el último durante un largo tiempo.

-Son varios los mensajes de la película.

-Sí y creo que muy positivos. Hoy, más que nunca, están conectadas las nuevas generaciones y uno puede viajar de un continente a otro con facilidad. El odio colectivo ha ido creciendo y nos da miedo todo aquello que es diferente. Sin embargo, creo que es imposible detener la ola de cambio que se avecina. Vivimos en un mundo maravilloso, con gentes de diferentes culturas. Eso, que creemos que nos separa, nos une porque dentro de nosotros somos todos iguales. Uno de mis mensajes favoritos de la película es que la familia no se forma con la sangre.

-Y a pesar de todo vivimos tiempos muy conflictivos. ¿Cree que la oscuridad impera en los líderes que nos dirigen?

-Considero que es necesario identificar de dónde surge esa oscuridad. En este filme tienes a una reina enfadada y hostil que piensa que su única forma de sobrevivir es destruyendo a los demás. En realidad, ella tiene miedo, es débil e ignorante. Creo que los líderes deben apreciar la fuerza y la diversidad. Hay gente que nace con tendencia hacia la oscuridad y la agresión, otros sufren a lo largo de su vida una situación que les hace perder confianza en los demás, no se sienten seguros y deciden protegerse. Pero creo que todos, llegado el momento, podemos cambiar.

-¿Siente conexión con un personaje como el de Maléfica?

-Cuando ella es joven piensa en no tener hijos porque no tiene en cuenta que puede llegar a ser una buena madre, hasta que tiene un hijo y descubre que puede serlo. Eso me inspiró. Del mismo modo que lo hizo su actitud hacia la inclusión, de cualquier tipo, algo que yo hago en mi trabajo con los refugiados. Me irrita cuando la gente habla del peligro de la diversidad y no de la riqueza. Yo valoro la belleza de ser diferente. Todos aquellos que temen ser excluidos por no sentirse igual, no hacen daño a nadie. Maléfica trata de ser auténtica, de ser ella misma hasta el final.

-¿Y cómo fue trabajar con Michelle Pfeiffer y Elle Fanning?

-El elenco completo es maravilloso. Hubo una gran unión entre todo el equipo, principalmente porque todos disfrutamos mucho en el rodaje de la primera película, bueno todos menos Michelle, que se adaptó muy bien al rodaje de este filme.

-¿Considera que este filme muestra personajes con los que las jóvenes pueden identificarse?

-Creo que no es una película solo para niñas. Tenemos personajes femeninos que son fuertes, diversos, pero también tenemos hombres extraordinarios que luchan por ellas. Quiero acentuar el hecho de que los hombres son importantes a la hora de contar esta historia. Es importante aprender unos de otros.

-Hay una escena en el filme donde Maléfica se ve obligada a taparse sus cuernos, en clara referencia a cuando las mujeres tienen que cubrirse el pelo. ¿Qué opina de ese tipo de imposición?

-Ese tipo de imposición puede ser horrible si no se elige, sobre todo si están siendo tratadas de una forma terrible y sienten que deben esconderse. Hay una parte de esta película, muy divertida para los niños, donde los animamos a ser ellos mismos, a no cubrir sus cuernos. Ya veremos si el mundo puede aceptarla, pero ese no es su problema, uno nunca debe esconder quien es.

-¿Siente presión ahora que llega el estreno del largometraje o ya está pensando en su próximo proyecto?

-Siento la presión de un artista que ama lo que hace. En mi vida suceden muchas cosas, no solo la interpretación. Ahora mismo, en los próximos años, quiero dedicarme exclusivamente a la educación de mis hijos. Están todos en una edad muy especial y no quiero perderme nada de ellos en este momento. Les quiero enseñar a valorarse, a que den lo mejor de ellos y se enfrenten al mundo con sus propias armas. En eso estoy concentrada en estos momentos, pero tengo muchas ideas locas para el futuro. Ya veremos lo que pasa.

-¿Considera a Aurora una heroína fuerte?

-Ella es una criatura suave y decidida, una luchadora que se permite ser auténtica. No tiene miedo ni pide perdón por sus valores. Aurora encuentra su camino buscando el equilibrio; no solo es una heroína fuerte, es un gran ejemplo para las jóvenes porque este filme muestra la evolución de la mujer.

-El vestuario de la película es sensacional.

-Increíble, ¿verdad? Me encantaron los vestidos de las dos reinas y cómo reflejan su personalidad. También me gustó el traje con el que peleo con Ingrith, aunque fuera muy incomodo (ríe).