Borrascas explosivas contra el anticiclón de las Azores

SOCIEDAD

En los próximos dos días Galicia se librará de la influencia de dos ciclogénesis explosivas gracias a las altas presiones que ejercen de escudo.

04 oct 2019 . Actualizado a las 11:11 h.

La meteorología poco a poco comienza a ajustarse a las condiciones propias del otoño. Esto es algo que ya se nota, por ejemplo, en el ambiente térmico que hay a primeras horas de la mañana. En algunas zonas del interior de la comunidad, las mínimas ya alcanzan valores negativos. En la localidad ourensana de Calvos de Randín se registró la pasada madrugada una temperatura de un grado bajo cero. En otros muchos puntos se mantuvo por debajo de los cinco. El avance de la nueva estación se percibe también en la progresiva disminución de las horas de luz. Los días son cada vez más cortos. El ocaso hoy tendrá lugar sobre las 20.15 horas, casi sesenta minutos antes que hace un mes.

Con las horas de luz también desciende la radiación solar en el hemisferio boreal mientras aumenta en el austral. Esto se traduce en un incremento del aire de origen polar que desciende desde el extremo norte hacia las latitudes medias y que permite que se formen las borrascas. Las altas presiones se alimentan de aire cálido, por ello dominan en primavera y verano, mientras que las bajas se nutren de aire gélido y se forman en otoño e invierno.

Si la configuración atmosférica lo permite incluso pueden aparecer las primeras borrascas explosivas de la temporada, justo como está ocurriendo ahora mismo. En las últimas jornadas el protagonista en el Atlántico fue sin duda Lorenzo, que consiguió pasar a la historia tras convertirse en el primer huracán que alcanzó categoría 5 tan al este del océano, lejos de las aguas cálidas del Caribe y el golfo de México.

Lorenzo fue un ciclón de origen tropical que decidió hacer una excursión hacia el norte, algo poco habitual aunque empieza a ser más frecuente. Los modelos están señalando que a corto plazo se va a registrar un importante actividad extratropical, es decir, de borrascas de toda la vida. Eso sí, el pronóstico señala que se van a formar dos ciclogénesis explosivas.

Son ciclones que pierden mucha presión en poco tiempo. En el caso de la primera, cae más de 30 milibares en 24 horas. La presión de la segunda desciende desde los 1.008 hasta los 979 entre hoy y mañana. La buena noticia es que apenas afectarán a Galicia. Los profundas borrascas se encontrarán durante su viaje por el Atlántico con el anticiclón de las Azores. Y el vencedor en ambas batallas meteorológicas será el sistema de altas presiones, cuyo escudo resulta inquebrantable. Los ciclones se verán forzados a tomar una trayectoria hacia el norte, lejos de la comunidad gallega.

La previsión indica que el sábado el frente de la primera ciclogénesis explosiva dejará precipitaciones débiles por la noche y únicamente caerán en las provincias atlánticas. A partir del domingo Galicia quedará en una situación intermedia entre altas y bajas presione que se traducirá en un mayor presencia de nubosidad en la mitad oeste y cielos algo más despejados en el interior.