No es la primera vez que lo hace
La polémica que envuelve a Bustamante tiene ya un cierto recorrido. Hace dos años, el cantante se vio obligado a suspender un concierto suyo. En esa ocasión, en el municipio vallisoletano de Laguna del Duero. Un médico le diagnosticó en el servicio de urgencias una faringoamigdalitis aguda, para la que también aportó un parte médico.
Sin embargo, ya en ese momento sospechaban de que no todo era trigo limpio. Tal y como apuntó El norte de Castilla, según fuentes de la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León, ese justificante fue investigado ante la duda de si habría sido falsificado. En ese momento, la oficina que lo representa, Global Talent Services (GTS) emitió un comunicado en el que expresaban su «absoluta indignación ante el desagrable cuestionamiento del estado de salud del artista». Alegaban que se trataba de un «documento privado que no puede ser divulgado públicamente. Nosotros no tenemos nada que esconder, pero el Ayuntamiento y el promotor insisten en demandar, tal vez seamos nosotros los que demandemos al consistorio por hacer público ese documento que atañe a la intimidad de David», explicaban desde GTS.