Ana Obregón, primera expulsada de «MasterChef Celebrity»

Mónica Pérez
M. Pérez REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

La presentadora protagonizó un emotivo momento al acordarse de su hijo Álex Lequio, que ha sufrido una recaída del cáncer que padece

12 sep 2019 . Actualizado a las 13:31 h.

Ana Obregón se convirtió anoche en la primera expulsada de MasterChef Celebrity. La presentadora, una de los fichajes estrellas del casting del concurso culinario, fue a primera en apearse al ser la que peor cocinó en la prueba de eliminación. La actriz y presentadora comenzó ganando la prueba de la caja misteriosa junto al diseñador Juan Avellaneda, lo que hizo que fuesen capitanes de la prueba por equipos. Ese fue uno de los momento más emotivos de la noche, ya que los jueces mencionaron la grave enfermedad contra la que lucha desde hace un año y medio Álex Lequio. «El mejor cuidado que se le puede dar a alguien que está como tu pequeño es una cocina saludable en casa hecha con todo el amor, y si es el amor de la madre, mejor que mejor», le dijo Jordi Cruz valorando muy positivamente su primer plato. «Como dijo el sabio, que tu medicina sea tu alimento y tu alimento sea tu medicina», añadió Pepe Rodríguez. Ana Obregón se quedó sin palabras y lloró desconsoladamente, mientras recibía el apoyo del resto de sus compañeros, como el actor Félix Gómez y la actriz Elena Furiase, que se refirió a ella como «Big mama». Detrás, en las cocinas, otros concursantes como Almudena Cid tampoco podía contener las lágrimas. 

«No me lo puedo creer, estoy feliz. La verdad que cuando te dan una buena noticia, después de este añito que llevo, de quimios y tal, ha sido como que se ha parado un reloj de que se ha parado el tiempo de las cosas malas y que ahora viene todo lo bueno», aseguraba Ana García Obregón. 

Pero todo comenzó a torcerse en la prueba de exteriores, donde los concursantes se desplazaron a Gerona, concretamente al restaurante Atempo, uno de los cuatro que dirige Jordi Cruz, para realizar «la prueba de exteriores más dura de la historia del programa». Allí Ana García Obregón no supo dirigir bien a su equipo y lo llevó a la prueba de eliminación. Tuvo especialmente roces con Vicky Martín Berrocal, que le terminó diciendo «chiquilla coge y haz algo», al ver a la presentadora dar vueltas en la cocina mientras le decía al resto lo que tenía que hacer. 

En plató Ana Obregón tuvo que ver como la imitaba Yolanda Ramos. «Que me imiten significa que estás arriba», aseguraba, aunque parecía algo molesta. 

En la prueba de eliminación Ana Obregón no logró convencer al jurado con unos bocados de atún en los que intentó escribir la palabras MasterChef en el plato con chocolate, pero se quedó muy lejos de sus intenciones. 

Jordi Cruz no tuvo piedad con ella y le dijo que había hecho «una marranada» y Samantha calificó su plató como una «vergüenza». Eso sí, se despidió de sus compañeros con su eterna sonrisa y desprendiendo optimismo y buen rollo.

MasterChef Celebrity logró un 19,4 % de cuota de pantalla congregando a 2,142.000 de espectadores en una noche en la que tuvo lugar la primera gran batalla por las audiencias de la temporada. GH Vip, con la entrada sorpresa de Antonio David Flores, fue lo más visto de la noche, con un 24,6 % del share y 2.529.000 de televidentes. 

Las primeras palabras de Ana Obregón tras «MasterChef»

Ana Obregón rompió su silencio el día después de su estreno en MasterChef Celebrity, para dar las gracias y hablar de la recaída de su hijo. «Cómo habéis podido apreciar anoche, esto de la cocina no se me da de oscar. Lo dijo Steven y lo ha confirmado Jordi. Aprovecho también para transmitiros mis disculpas por no haber podido estar en mi querido @festval_oficial . En ese momento estaba con mi hijo en el hospital como hubiera hecho cualquier madre. Desde aquí lanzo un abrazo a mis compañeros para que sigan luchando en conseguir el mejor plato y mucha fuerza a todos l@s valientes que siguen luchando la misma batalla que mi hijo. Gracias de corazón por vuestro apoyo y cariño siempre en esta lucha. #fuckcancer», publicaba. 

Fatídica coincidencia

La emisión del programa coincide en el tiempo con la recaída del cáncer de Álex Lequio, conocida hace apenas unos días. La semana pasada Ana García Obregón fue la gran ausente en la presentación oficial del programa en el Festval de Vitoria, algo que ya extrañó mucho. Poco después era el propio Álex Lequio el que confirmaba en ¡Hola! que en una de sus revisiones había surgido un contratiempo en su lucha contra el cáncer. Sin ahondar en más detalles, tanto su madre como su padre Alessandro Lequio están a su lado acompañándolo, como ya ocurrió en marzo del 2018, cuando la familia se desplazó a un prestigioso hospital en Nueva York para que recibiese tratamiento. 

La última foto que colgaba Ana Obregón de los dos juntos eran a las puertas del Ábac, el restaurante de Jordi Cruz en Barcelona. «‘Comer de cine.' Nunca le encontré el sentido a esta frase. Hasta hace 2 días @abachotelrestaurant Admiración absoluta por @jordicruzoficial ( a pesar de lo duro que es como juez).Pensaba que el arte no se servía en la mesa pero ya veo que la creatividad no tiene límites. En fin, de oscar. O un par de ellos. Mejor dicho, de todos», escribía. 

La trágica noticia se conocía a finales de marzo del 2018, cuando la revista Diez Minutos publicaba unas fotografías de Álex Lequio, junto a su novia de entonces, su madre y su padre entrando en un hospital de Nueva York especializado en el tratamiento de cáncer, el Memorial Sloan Kettering Cancer Center. Durante meses, lo que le sucedía a Álex Lequio estuvo rodeado de un gran secretismo. «No voy a hablar. Lo estamos llevando todo en silencio», declaraba en aquel momento el joven a El Español

Fue en un acto en el que en un principio se habló de que Álex Lequio podría asistir, ya que lo organizaba su empresa, cuando su padre, Alessandro Lequio, puso nombre a la enfermedad que sufría y explicaba además los motivos por los que habían tomado la decisión de que se tratase de la enfermedad en Estados Unidos. «Por su edad, hemos preferido que esté en las mejores manos y las mejores manos encima son las de un español, Josep Baselga. Y es algo que debería llenarnos a todos de orgullo», aseguraba. «El cáncer es un tratamiento largo y penoso en el que no hay novedades ni evolución hasta que todo termina. Es una enfermedad larga y dura», terminaba. 

Se terminaban así meses de total hermetismo entorno a la salud del joven que en octubre reaparecía en público muy animado y optimista, algo que ha seguido haciendo desde entonces. «Muchas gracias por venir. Estoy muy agradecido por todo el apoyo. Y nada... ánimo a todos los luchadores. Gracias de corazón», aseguraba. «No hay que dramatizar», declaraba en una entrevista en la revista ¡Hola! hace unos meses. «El cáncer no es sinonimo de fatalismo y muerte, sino al revés: es sinónimo de vida», añadía. Incluso bromeaba con su cambio físico: «A mí, mirarme al espejo y parecer un reptil me hace gracia. Pero entiendo que haya gente que igual ese cambio físico le pueda impactar». 

También su madre, Ana Obregón, que lo dejó todo para acompañar a su hijo en tan duro trance, ha hablado abiertamente de cómo afrontan la enfermedad. «Cuando el médico me dice "su hijo tiene un tumor", es como si se hubiera bajado de repente el telón de mi vida», explicaba en ¡Hola!. «Me pasé toda la noche llorando sentada al lado de mi hijo dormido», explicaba. Y tres días después se confirmaba el fatal diagnóstico: «Era maligno y, además, de un tipo del que había muy pocos casos en el mundo. Desde ese momento supe que yo ya no podía desmoronarme». La bióloga y presentadora fue muy clara en cómo habían afrontado la enfermedad: «Mi hijo llegó a preguntarme si se iba a morir», confesaba en Volverte a ver, el programa que presenta Carlos Sobera en Telecinco

El pasado mes de junio era el propio Álex Lequio el que explicaba que no podía asistir a un evento que tenía programado porque estaba en el hospital por un «susto»