Las terrazas hosteleras, en el punto de mira de la guerra contra el tabaco
SOCIEDAD
En el 2018 en Galicia se investigaron 2.402 locales de los que 536 fueron sancionados
16 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.El futuro de las terrazas cubiertas en las que se fuma pende de un hilo. Durante el 2018 en Galicia se investigaron 2.402 locales hosteleros, de los que salieron 536 expedientes sancionadores con el telón de fondo del Plan anual de inspección de tabaco (PAIT). Aunque los datos son provisionales, muestran que la Xunta todavía debe estar alerta para garantizar el cumplimiento de la ley antitabaco, esa misma norma que, según la ministra de Sanidad en funciones, María Luisa Carcedo, las comunidades autónomas deberían respetar con «con precisión».
Desde la puesta en práctica de la reglamentación para frenar el tabaquismo, en el 2005, algunos hosteleros han buscado lagunas legales, rendijas, con las que permitir que sus clientes fumen en sus establecimientos. El truco más habitual desde entonces ha sido instalar terrazas que se abren y que se cierran en función de las condiciones climatológicas y acabar facilitando el consumo de tabaco aunque las lonas estén desplegadas. Según un estudio realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el 87 % de los locales con este tipo de espacios no cumplen la normativa.
Frente a los intentos continuados de los empresarios para sortear estas prohibiciones, la ley del 2010, que modifica la del 2005, lo deja claro: «Se entiende por espacio al aire libre todo espacio no cubierto o todo espacio que estando tapado esté rodeado lateralmente por un máximo de dos paredes, muros o paramentos».
Por esta normalización del quebrantamiento de la ley y por la incapacidad de las comunidades autónomas de controlar a toda la industria hostelera, según Carcedo, el Ministerio de Sanidad ha propuesto endurecer las leyes que regulan el consumo de alcohol y tabaco.
Aunque las terrazas cubiertas son uno de los principales objetivos de las inspecciones de Sanidade, la supervisión va más allá. El PAIT también vigila que la venta, el suministro y la publicidad del tabaco en los establecimientos hosteleros se hagan con arreglo a la ley. Este plan, enmarcado en el Programa galego de promoción da vida sen tabaco, establece un número mínimo de inspecciones de oficio a realizar por cada una de las cuatro jefaturas territoriales de la consellería. En el 2019 se presta especial atención al cumplimiento de la normativa en las terrazas de los establecimientos, un apartado básico en cualquier inspección de hostelería.
Varios tipos de infracciones
La ley estatal que regula las sanciones para los distintos tipos de infracciones contempla tres categorías: leve, grave y muy grave. Aunque hay multitud de posibilidades, las infracciones leves más habituales son la señalización ausente o incorrecta sobre la prohibición de venta de tabaco a menores de edad y la de la prohibición de fumar en zonas no habilitadas. Ambas, junto a la infracción de los clientes por fumar en zonas no permitidas, conllevan multas con importes de entre 30 y 600 euros.
La venta manual de paquetes de tabaco no provistos de capa natural, en unidades sueltas o en empaquetados de menos de 20 unidades se considera grave, al igual que las irregularidades en las máquinas expendedoras y la permisividad de los hosteleros ante los clientes que fuman en zonas en las que es ilegal hacerlo. Todos los incumplimientos importantes están castigados con sanciones que van desde los 601 hasta los 10.000 euros.
La publicidad
La infracción grave más habitual y que puede suponer una multa de 10.000 hasta 600.000 euros es la publicidad, promoción y patrocinio del consumo de tabaco. Los ejemplos más comunes son los anuncios en las máquinas expendedoras, la presencia de objetos y carteles con marcas de tabaco, y la organización de eventos de promoción de productos de este tipo.