Jesús Vázquez: «A algunas madres ha habido que sujetarlas en el programa»

Julián Alía MADRID / COLPISA

SOCIEDAD

Luis Miguel González

El presentador gallego regresa al prime-time de Telecinco con un programa de citas con madres e hijas

26 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Sobre veinte madres recae la difícil tarea de elegir pareja para sus hijas en Me quedo contigo, el programa que acaba de estrenar Telecinco. En él, un soltero baja en el ascensor, y son las veinte progenitoras las que tienen que decidir si siguen adelante para buscarle una cita con su hija, o si apagan el atril y se retiran de la carrera. El encargado de capitanearlo es Jesús Vázquez (Ferrol, 53 años), que vuelve al canal principal de Mediaset tras conducir el formato Bake off en Cuatro.

-¿Qué es «Me quedo contigo»?

-Es la revolución de los programas de citas. Es un formato que se hace desde hace muchos años y que está presente en unos treinta países. Mediaset decidió comprarlo, y los de Fremantle España (la productora), como son tan creativos y tan salados, le han dado una vuelta. Por primera vez en el mundo se va a hacer esta versión. En el resto son veinte chicas y un soltero que baja por el ascensor, y aquí traemos a las veinte madres, y a las chicas las subimos a un pisito con unas pantallas para que vean y escuchen lo que pasa, pero sin que puedan decidir ni hablar con sus madres.

-Y las madres apagan el atril si no les gusta lo que ven.

-Eso es. Aquí son las madres las que, según lo que conocen a sus hijas, tienen que pensar si el soltero les gusta o no. A partir de ahí se producen todo tipo de situaciones, porque las madres no siempre conocen tan bien a sus hijas y les eligen chicos que no les gustan, o apagan el atril cuando sí. Todo eso nos permite jugar mucho más que en el resto de los países.

-La distribución recuerda a «Allá tú».

-Esa fue la pauta cuando nos reunimos para preparar el programa. Me mencionaron las palabras mágicas, que son Allá tú, y con eso yo ya tenía bastante. Dijeron: 'Queremos que recuperes ese registro, porque vas a funcionar muy bien, con mucha empatía y con todas las payasadas que quieras, dejándote llevar'. Y ahí yo me siento muy cómodo, con muy poquito guión, y cada programa es diferente y nunca sabemos cómo va a acabar. Aquí hago de todo: bailo, hago gimnasia, canto, me tiro por el suelo. En mi línea de cuando estoy a gustito.

-¿Cómo se han comportado las madres?

-A las madres algunas ha habido que sujetarlas. Les digo: '¡Que no es para ti!, piensa en tu hija'. De hecho, a raíz de eso, como hay madres divorciadas, solteras. planteamos hacerlo al revés. Suben las madres al pisito, y eligen las hijas. Hemos hecho tres grabaciones especiales con madres que han pasado por aquí.

-¿Y se ha pensado en alguna otra versión?

-Claro. Está contemplado. Me encantaría, por supuesto, hacer una de chicos gais con sus madres. Ese sería fabuloso, pero tenemos que estudiar también otras combinaciones, porque no siempre funciona igual. Las chicas arriba son maravillosas, porque enseguida intiman y hablan de todo, y de repente tener ahí a veinte tíos mirándose entre ellos no sé qué tal funcionaría. Y también tenemos pensada una versión VIP.

-¿Usted se hubiese fiado de su madre para encontrar pareja?

-Bueno, mi madre era muy conservadora, y seguro que me hubiese buscado una buena chica. A ser posible, con un collar de perlas y de una familia respetable. Así que no, no hubiese seguido su consejo.