Políticos franceses insultan a Greta Thunberg, la joven activista contra el cambio climático

la voz REDACCIÓN

SOCIEDAD

PHILIPPE WOJAZER

Los diputados de la derecha le llamaron «Premio Nobel del miedo» o «Gurú apocalíptica» y «Profetisa en pantalones cortos»

24 jul 2019 . Actualizado a las 15:29 h.

La activista climática sueca Greta Thunberg, de 16 años, participó este martes en un debate en la Asamblea Nacional en París al que renunciaron a acudir algunos diputados de la oposición, principalmente de la derecha, que llamaron al boicot. El diputado Julien Aubert, del partido conservador Los Republicanos (LR), calificó en Twitter a la joven activista de «profetisa en pantalones cortos, premio Nobel del miedo», en referencia a su reciente nominación al premio Nobel de la Paz, y su compañero Guillaume Larrivé la tildó de «gurú apocalíptica».

Thunberg respondió en la Asamblea a los ataques recibidos: «Somos objeto de amenazas y burlas por citar cifras y hechos científicos», y destacó que lo único que piden a la clase política es que escuche a los investigadores. La joven activista invitó en su discurso a «aquellos que dicen que exageramos» a leer el último informe del Grupo de Expertos Intergubernamental de la ONU (GIEC), que llamaba a actuar para disminuir el aumento de temperaturas de 2ºC a 1,5ºC. Además, alertó de que «el verdadero peligro son las empresas y los políticos que fingen actuar y no hacen nada».

Thunberg llegó a la Asamblea, rodeada de cámaras, a las 11.30 hora local (09.30 GMT) acompañada por el diputado de la mayoría presidencial Matthieu Orphelin, promotor de su invitación, y fue recibida por el presidente de la Cámara baja, Richard Ferrand. Más de 160 diputados de casi todos los partidos -con la excepción de la ultraderechista Agrupación Nacional (RN) de Marine Le Pen- forman parte del colectivo creado por Orphelin «Aceleremos la transición ecológica y solidaria» que organizó el debate con Thunberg en una sala de la Asamblea.

La activista lanzó una pregunta: «¿Cómo podemos actuar sin sonar alarmistas?», y resaltó que será imposible resolver esta degradación climática sin tratarla como una verdadera crisis. En su defensa, el diputado Orphelin replicó a sus críticos que «hay que luchar contra el cambio climático, no contra Greta Thunberg».

En el Gobierno, varios de sus miembros mostraron su apoyo a lo que representa la activista adolescente, pero marcando distancias con algunos de los contenidos de sus discursos. La secretaria de Estado para la Transición Ecológica, Brune Poirson, presente en el acto, señaló que no está «forzosamente de acuerdo con todo lo que dice», pero que comparte su diagnóstico. «Necesitamos voces de alerta como ella, en particular con los jóvenes, porque el combate con los escépticos está lejos de haberse ganado», añadió.

La visita de la ecologista sueca a la Asamblea se produjo el mismo día en que se sometió al voto de los diputados franceses la ratificación del acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y Canadá (CETA), muy criticado por los ecologistas. El partido conservador criticó que su discurso haya sido fijado para este día, con la supuesta intención de influir sobre la votación del CETA, lo que, a su juicio, se debe a las maniobras de grupos de presión.

La joven activista recibió este domingo el Premio de la Libertad de Normandía, en esa región del norte de Francia, en reconocimiento por su acción para concienciar sobre la necesidad de actuar contra el cambio climático.