El misterio de las tumbas del Vaticano: Emanuela Orlandi no está y las princesas tampoco

ADRIANO FERREIRO / M. F. REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Este jueves en el Vaticano, donde esperaban encontrar alguna pista sobre la desaparición de la niña Orlandi
Este jueves en el Vaticano, donde esperaban encontrar alguna pista sobre la desaparición de la niña Orlandi REMO CASILLI

El Vaticano abre las sepulturas de dos princesas para buscar el cuerpo de la niña y, para sorpresa de todos, no había ningún resto humano de ninguna de ellas

11 jul 2019 . Actualizado a las 20:09 h.

A la desaparición de Emanuela Orlandi se une un nuevo misterio. El Vaticano ha comenzado este jueves con las labores de apertura de las tumbas de dos princesas para comprobar si se encontraba allí el cuerpo de la niña desaparecida desde 1983 y la sorpresa fue mayúscula. Al proceder a la apertura, los allí presentes se llevaron una decepción al comprobar que el cuerpo de la desaparecida no estaba allí, lo que parece indicar que los investigadores seguían una pista falsa. Pero lo más sorprendente es que tampoco estaban los restos de las dos princesas que se suponía que debían estar enterradas ahí

La abogada de la familia Orlandi, Laura Sgrò, explicó a los medios tras asistir a la exhumación en la llamada «Tumba del Ángel» y la adyacente, donde supuestamente se hallaban los cuerpos de la princesa Sofía von Hohenlohe, fallecida en 1836, y la  princesa Carlotta Federica de Mecklenburgo, que murió en 1840, que ambas sepulturas se encontraban vacías. «Todos estamos muy sorprendidos», expresó Sgró en nombre del hermano de la joven desaparecida, Pietro Orlandi. Mostró además su malestar al afirmar que el Vaticano «podía haber verificado antes si en estas tumbas se había sepultado a las princesas o eran solo monumentos funerarios para rendirles homenaje».

El hermano de Emanuela Orlandi señaló que se esperaba todo menos encontrar las sepulturas vacías, después de que incluso el guardián del cementerio hubiera declarado que una de las familias le había pedido que pusiera de vez en cuando flores frescas y velas en una de las tumbas.

En la tumba de la princesa Sofía von Hohenlohe se profundizó hasta encontrar una cavidad subterránea de unos 4 metros por 3,70, completamente vacío al igual que el sarcófago de la princesa Carlota Federica. 

Un caso sin final

Emanuela Orlandi desapareció en junio de 1983, hace más de 36 años. Tenía 15 años y no dejó ningún rastro a la salida de una clase de música en la Plaza de San Apolinar, en el centro de Roma. Algunas hipótesis que no llegaron a ser confirmadas por la Justicia italiana apuntaban a que la joven podía haber sido secuestrada por un grupo extremista turco para pedir la liberación de Ali Agca, el terrorista encarcelado entonces por haber atentado contra el papa Juan Pablo II en 1981 o, que Orlandi fue víctima de una red pedófila detrás de la cual se encontrarían altos jerarcas de la Iglesia.Pero nunca se han podido demostrar estas teorías.

La familia Orlandi pidió investigar en el cementerio del Vaticano después de que el verano pasado recibieran una carta anónima con una foto de la tumba con la frase «Busque donde indica el ángel» y pidieron a la Secretaría de Estado vaticana que autorizase su apertura.

La Secretaría de Estado de la Santa Sede autorizó en abril del 2018 la apertura de la investigación. Se esperaba que a lo largo de esta mañana de este jueves se encontrasen restos humanos en las tumbas y se pudieran proceder posteriormente a la identificación de los huesos. Las conclusiones de esta jornada fueron, sin embargo, muy diferentes. Ningún cuerpo se halló dentro de las sepulturas y la incertidumbre es ahora incluso mayor.

La abogada de la familia indicó que ahora el Vaticano tendrá que dar información sobre por qué estaban vacías y renovó su llamamiento para que quien sepa algo de lo que ocurrió a Emanuela rompa el silencio, que dura ya 36 años.