La situación meteorológica actual provocará esta semana un gran contraste entre las provincias gallegas
10 jun 2019 . Actualizado a las 17:32 h.Ninguna de las últimas actualizaciones de los modelos meteorológicos muestra un cambio importante de la situación atmosférica actual. Y esto no es una buena noticia para quienes consultan estos días la previsión del tiempo en busca de sol y calor.
El aire frío que sobrevuela Galicia se mantendrá prácticamente durante toda la semana, provocando que las temperaturas sean bajas para la época del año, tanto las máximas como las mínimas. De pronto, el abrigo se ha vuelto imprescindible, sobre todo por las noches. Únicamente en Ourense se van a registrar valores agradables, entre los 20 y los 24 grados. En Pontevedra también serán suaves, entre los 19 y loas 21. En las provincias de A Coruña y Lugo, el termómetro apenas ascenderá hasta los 18 grados. Las anomalías negativas (valores por debajo de la media) superan los cinco grados en muchos casos.
En cuanto al estado del cielo, en ausencia de una circulación del nordés, las nubes serán frecuentes. Claro que no en todas las zonas de Galicia por igual. El viento soplará del norte y noroeste y concentrará la humedad en A Coruña y Lugo. La nubosidad de tipo bajo está garantizada y parece muy probable que pueda caer algunas lluvias de tipo débil. Mientras tanto, en Pontevedra y Ourense, la humedad será mucho más escasa y lucirá el sol en muchos momentos.
A medio plazo
Ahora mismo, resulta de lo más complicado tratar de anticipar qué va a pasar con el tiempo a medio plazo. Galicia se debate estos días entre las borrascas, que están asumiendo más protagonismo del que quisiésemos, y el anticiclón de las Azores, que por algún motivo parece haber perdido toda la energía de golpe. La previsión sigue apuntando que a partir del jueves habría un ligero reforzamiento de la inflluencia de las altas presiones pero con vientos de componente oeste. El fin de semana podría haber un tiempo más seco pero sin grandes ascensos de las temperaturas.
Ley de compensación
Esta meteorología tan cambiante es el precio que estamos pagando por haber disfrutado en varias ocasiones, a lo largo del 2019, de episodios de altas temperaturas. La temporada de playa para muchos gallegos ha comenzado este año allá por marzo. Pero ojo, esto no significa que exista una ley de compensación. Es decir, como en abril y mayo Galicia registró temperaturas elevadas para la época del año, ahora la atmósfera se está cobrando el favor. Más bien, lo que está ocurriendo es que la corriente en chorro lleva meses circulando con grandes meandros y dependiendo de dónde se sitúe la comunidad gallega cada semana, hablamos de calor excesivo o de un ambiente térmico más propio de principios que de finales de primavera.