Eurovisión 2019 busca su ganador entre una revolución de favoritos en las apuestas

Laura Placer Breijo
Laura Placer REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Eurovision

Miki Núñez cerrará el festival con «La Venda» y no deja de subir en las casas de apuestas en una edición incierta

18 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Sin violines sobre el escenario, sin pianos ardiendo y, sobre todo, sin favorito. Así se estila la atípica 64.a edición de Eurovisión, en la que España aspira a mejorar los malos resultados obtenidos en los últimos años. Esta noche (21.00 h, La 1), los 26 países finalistas se subirán al escenario del Expo Tel Aviv para luchar por uno de los micrófonos de cristal más disputados de la historia del festival.

Miki será el último en actuar y aspira a romper la racha nacional de 50 años sin ganar Eurovisión. Salomé, en 1979, fue la última en llevarse la victoria con Vivo Cantando, el único triunfo compartido del festival debido al cuádruple empate entre España, Francia, Países Bajos y el Reino Unido. Aunque el catalán no consiga el primer puesto, una plaza en el lado izquierdo de la tabla superaría los resultados de los últimos cuatro años, en los que ninguno de los candidatos logró posicionarse por encima del vigésimo puesto. A priori, quedar entre los 15 primeros entra en los planes del cantante. Las casas de apuestas llevan varios días colocándolo sobre esa posición y ayer consiguió escalar casi hasta el top 10. La Venda llenará de color y alegría el escenario israelí como ya lo hizo semanas antes del festival en las fiestas internacionales de Ámsterdam, Londres y Moscú, donde conquistó al público que hoy decidirá la mitad de los puntos en juego. Otra fan acérrima de la canción es la ganadora del año pasado, Netta Barzilai, que ha asegurado en varias entrevistas que le encanta la propuesta de Miki.

La puesta en escena de España, valorada en 40.300 euros e ideada por el escenógrafo Fokas Evangelinos, que también está detrás de la de Rusia, no dejará a nadie indiferente para bien o para mal. Una gran estructura que imita una casa servirá de eje de la actuación, en la que Miki estará acompañado de una marioneta gigante llamada Paco y de los bailarines Ernesto Santos, Fran Coem, María Acosta, Mary Martínez y Mikel Hennet. Este último es un viejo conocido del festival, ya que fue uno de los componentes del grupo D’Nash, con el que España consiguió un vigésimo puesto en el 2007.

Cerrar la gala puede ser un revulsivo para Miki, y es que se asocia a las últimas canciones más posibilidades de ser recordadas a la hora de votar. Sin embargo, el catalán tendrá que enfrentarse a un problema importante. Precediendo a La Venda en la traca final de actuaciones se encuentran muchos de los pesos pesados del festival como Azerbaiyán, Italia, Francia, Suiza y la espectacular Australia, que actuará inmediatamente antes que Miki.

Los favoritos

A falta de bola de cristal y máquina del tiempo, las casas de apuestas son la vía principal para predecir el ganador. A pesar de la revolución de los últimos días, parece que Países Bajos parte como favorito sobre el resto con Arcade, una balada intimista que habla sobre la pérdida y que fue muy ovacionada en su semifinal.

Pero nada está decidido en una edición llena de sorpresas. El sueco John Lundvik y sus coristas The Mammas no se lo van a poner fácil al holandés Duncan Laurence con su tema Too Late for Love, una balada enérgica con toques góspel que puede llevarse muchos votos del jurado. Otra fuerte candidata a la victoria es la australiana Kate Miller-Heidke, que lleva una de las puestas en escena más impresionantes del festival. Elevada siete metros sobre el suelo crea un efecto de gravedad cero, así se llama también su canción, que fue clave en su clasificación para la gran final.

El ritmo no faltará tampoco esta noche sobre el escenario del Expo Tel Aviv. Suiza, Malta, Chipre y Bielorrusia serán algunas de las candidaturas que más hagan bailar al público. El gran favorito de este grupo es el suizo Luca Hänni con su canción She Got Me. El tema muestra claras influencias de la subcampeona del año pasado, Fuego, e incluso comparten el mismo director escénico.

Azerbaiyán, Italia, Rusia, Islandia y Francia son también algunos de los posibles ganadores de esta noche. Según Google, el país galo sería el vencedor si los puntos se repartieran en función de las búsquedas en su navegador, mientras que Spotify ha revelado que el tema más escuchado en su plataforma ha sido el del italiano Mahmood.

Otras actuaciones 

Además de los 26 países finalistas, la gala contará con varios espectáculos adicionales. El más esperado es, sin lugar a dudas, el de la estrella internacional Madonna, que interpretará su icónico Like a Prayer y Future, un tema de su nuevo disco Madame X. Las negociaciones con la cantante fueron especialmente duras y su presencia en la final se vio en peligro varias veces hasta que firmó definitivamente el contrato el pasado jueves.

Pero Madonna no será la única invitada de la noche. La ganadora del año pasado, Netta Barzilai, interpretará una de sus canciones en la apertura de la gala y su tema Toy formará parte de un curioso intercambio de canciones que protagonizarán los ganadores del 2014 y del 2015 Conchita Wurst y Mans Zemerlöw, Eleni Foureira y Verka Serduchka, subcampeones en Eurovisión 2007 y 2018.