La tonadillera ha tenido una gran bronca con Carlos Lozano y ha terminado siendo evacuada de la playa junto a las Azúcar Moreno
07 may 2019 . Actualizado a las 17:51 h.Isabel Pantoja y sus compañeras de grupo, Encarni y Toñi Salazar (Azúcar Moreno) han sido evacuadas de la isla de Honduras tras un brutal enfrentamiento con Carlos Lozano. Las concursantes han asegurado que no aguantan más a su compañero (que es cierto que es especialista en sacar que quicio a sus compañeras ya que esa parece su estrategia) y han amenazado con abandonar Supervivientes. Así lo ha adelantado Toñi Moreno en exclusiva durante la emisión de Mujeres y Hombres y Viceversa, según recoge Chance. «Carlos Lozano es 'perro viejo' y sabe que sus peleas con la Pantoja son minutos de televisión. Además, no hace falta mucho para sacar de quicio a Isabel», aseguraba la presentadora.
Al parecer, aunque en los últimos días Isabel Pantoja y las hermanas Salazar habían protagonizado varios desencuentros, después de que Toñi y Encarna le llamasen «estúpida» y «soberbia» entre otras lindezas, ahora se habrían aliado contra Carlos Lozano. La última gran discusión comenzó después de que Carlos Lozano pusiese en duda la profesionalidad de Isabel Pantoja e incluso la haya comparado con Rocío Jurado. Esta bronca ha provocado que tanto Isabel Pantoja como las Azúcar Moreno hayan sido trasladadas a la cabaña presidencial, donde continúan concursando en las mismas condiciones que sus compañeros, mientras recapacitan sobre su decisión de abandonar. Si de verdad lo hiciesen tendrían que enfrentarse a una penalización económica, que generalmente, va condicionada a su caché (por lo que se supone que la de la tonadillera no sería pequeña).
Todo esto llega apenas dos días después de que Jordi González advirtiese a otra concursante, Violeta Mangriñán, extronista de Mujeres y Hombres y Viceversa, si estaba intentando ponerse enferma para ahorrarse la sanción económica y así abandonar el programa. Si se trata de motivos médicos, claro está, no se tendría que abonar dicha multa.
La experiencia de Violeta como Supervivientes ya empezó mal. Durante la primera gala se la vio llorar (no se sabe muy bien el porqué) y también es cierto que ante la expectación que suponía la entrada de Isabel Pantoja en el programa poco importaban las lágrimas de una joven que casi nadie sabía quien era. Resuelta la duda de sus orígenes, Violeta ya recibió una buena reprimenda tras sus quejas insinuando trato de favor durante la primera prueba por parte de Lara Álvarez, que sacó su carácter para pararle los pies a la extronista. Le dijo que ella «se puede equivocar» pero que el programa tiene a un grupo de «profesionales detrás que siguen todos vuestros movimientos y si tienen que rectificar lo harán», ante las quejas de varios concursantes de las trampas de sus contrincantes.
Y parece que desde Supervivientes sospechan de la actitud de Violeta desde el primer día. La extronista que es una de las que más ha llorado en la isla desde que llegó allí, va camino de no terminar muy bien con el programa si sigue así con la actitud. En el debate del domingo, que presenta Jordi González, el presentador terminó recriminándole su comportamiento, después de que fuese evacuada de la playa en la que se encontraba por motivos médicos. Violeta Mangriñán tuvo que ser atendida por los médicos del programa al estar al borde de la deshidratación, después de negarse a ingerir ningún alimento ni beber agua alegando tener «mucha angustia y muchas ganas de vomitar».
«¿No estarás ahí forzando la situación para abandonar el concurso sin asumir la penalización?», le preguntaba Jordi González. Ella negó tal acusación, pero el presentador siguió con su bronca. «Te niegas a beber las isotónicas, te niegas a comer, entonces te estás debilitando. ¿Por qué crees que te han evacuado?», proseguía el presentador, diciéndole que eso era algo que no solo sospechaban desde la dirección del programa si no también sus propios compañeros. «Hay centenares de miles de personas que darían cualquier cosa por estar en tu lugar, por concursar en este programa», le recordaba Jordi González.
Aún así Violeta Mangriñán seguía en sus trece. «Me estáis intentando dejar de que estoy forzándolo para abandonar. Yo sé lo que se debe estar hablando allí y es al contrario, quiero estar bien para volver» y en un esperpentico momento pedía que el programa pusiese un vídeo en el que mostrase que ella en realidad no quería irse. Finalmente la concursante, tras escuchar emocionada los consejos de Sofía Suescun desde el plató (ganadora de la última edición de Supervivientes), decidía quedarse en la isla. «No tengo ningún interés en ponerme enferma», aseguraba.
Supervivientes sigue afianzándose en la parrilla televisiva dándole la razón a Mediaset en su fichaje millonario a Isabel Pantoja. El debate del domingo obtuvo un 24 % de cuota de pantalla y congregó a 2.977.000 de espectadores.