Kiko Rivera tuvo que conformarse con el segundo puesto en una reñidísima final que estuvo abierta hasta el último minuto
12 abr 2019 . Actualizado a las 13:24 h.María Jesús Ruiz se ha convertido en la ganadora de GH Dúo en una de las finales más reñidas de la historia. Kiko Rivera se ha tenido que conformar con el segundo puesto y quedarse a punto de conseguir el maletín de los 100.000 euros que se ha llevado la exmiss. Y todo rodeado de una polémica gala en la que ni los fans de María Jesús Ruiz ni los de Kiko Rivera parecían estar conformes. Después de que el miércoles los dos finalistas descubriesen que no saldrían esa noche de la casa y deberían esperar al jueves, parecía que habían enterrado el hacha de guerra. Pero nada más lejos de la realidad: la llegada a plató volvió a prender la llama del conflicto.
Lo de concursante de realities parece que se ha convertido ya en una profesión. María Jesús Ruiz se corona como ganadora después de su paso por GH Dúo, al que entró junto a Julio Ruz, su expareja y padre de una de sus dos hijas, y Carolina Sobe, con la que este había mantenido una relación. Y venía de concursar en Supervivientes, donde aguantó casi hasta la recta final. La exmiss, que ya concursó hace años en La Granja de los Famosos - protagonizó junto a Dani Dj unos polémicos momentos más allá del edredoning-, ha encadenado un reality con otro. Y pese a que sus problemas con su madre, que parece tener una fuerte influencia en ella, con sus ex, Julio Ruz (que fue expulsado de la casa por su actitud con ella) y José María Gil Salgado (con el que protagonizó una especie de montaje para volver a visitar platós, con denuncias de malos tratos que en alguna ocasión ha asegurado que habían sido falsas hacia el padre de su primera hija, María Jesús Ruiz se granjeó en los últimos años más detractores que apoyos. Por eso es especialmente llamativo que haya conseguido vencer GH Dúo con el favor del público. «Os agradezco de corazón a todo el que ha conseguido que yo esté aquí», aseguraba mirando a cámara al final del programa, cuando ya tenía el maletín en sus manos, sabedora de que su hazaña era casi épica.
Desde hace años, una parte de la audiencia de las diversas ediciones de Gran Hermano siempre se acoge a la teoría de la conspiración y asegura, de una manera o otra, que el concurso está amañado. No están los tiempos fáciles para esas cosas, no hay más que recordar la final de Got Talent que ganó El Tekila. Pero aún así la sombra del tongo permanece. Basta una expresión sacada de contexto para que la mecha prenda sin control. Este año, una palabras de Kiko Hernández hace unos días bastaron para que apareciesen de nuevo las teorías conspiranoicas. «GH Dúo entregan el maletín a María Jesús Ruiz el... ¡Si toca, si toca!», dijo el presentador de Sálvame, ante la mirada atónita de sus compañeros.
Pero si unos creían que María Jesús Ruiz había ganado el concurso semanas antes de que llegase la final, también abundan las teorías de quiénes afirman que el público desbarató el jueves los planes de Mediaset. El trato de favor de Telecinco a Kiko Rivera al concederle más minutos a la estancia de Isabel Pantoja que a la de Juani en su visita a Guadalix, añadía más leña a un fuego que ya estaba bastante avivado. Pero no es tanto cuestión de ecunanimidad, más bien de interés y por supuesto, de morbo y audiencia, que al final es lo que cuenta. Y durante la gala interesaba mucho más lo que Isabel Pantoja tenía que decirle a Kiko Rivera, que las lágrimas de Juani y María Jesús Ruiz (que ya ha entrado al menos otra vez en la casa de GH Dúo en las últimas semanas). Una Isabel Pantoja que llevaba meses recluida y sin hablar con los medios de comunicación, entraba en la casa de Guadalix con un recado para su hijo: decirle que irá a Supervivientes. «Te quiero hijo, te he visto 24 horas al día», le decía. «¿No serás la próxima concursante de Gran Hermano VIP del año que viene, no?», le preguntaba a la tonadillera después de que Jordi González animase a contarle la noticia.
00031555064898843130131
Finalmente le soltaban la bomba a Kiko Rivera, que su madre concursará en Supervivientes. «Ay, mamá… ¡qué malamente lo vas a pasar!», le espetaba su hijo. «¿Sabes lo que pasa? Que la vida es así de justa. Y ella se ha pasado 24 horas allí viéndome y ahora lo voy a hacer yo con ella. Maravilloso. Es que uff.. Es una información que… uno está aquí, sin enterarse de nada y, de repente, viene aquí mi madre a decirme que va a ser concursante de Supervivientes y… Se pasa muy mal, pero ella lleva siendo una superviviente desde hace mucho tiempo. Lo va a hacer fenomenal. Tiene que disfrutar y no venirse abajo», decía aceleradamente Kiko Rivera que aún no sabía que digerir esa información.
Y más cuando Isabel Pantoja se prestó a hablar de todo, incluso de la adicción a las drogas de su hijo. «Me quedé en shock cuando lo dijo, pasé una noche fatal, pero al mismo tiempo me sentí muy orgullosa. Lo importante es que mi hijo está bien. Nos costó mucho pero él ha sido igual de fuerte que yo. Yo dejé absolutamente todo para estar con él y su mujer, a la que adoro con todo el alma, y no me separé de mi hijo ni un solo segundo. Gracias a Dios a día de hoy mi niño está sano ¡y se puede!», declaraba.
Eso, mal que les pese a los seguidores de María Jesús Ruiz, es oro puro para el share de Telecinco, en la final de GH Dúo logró un 33,9 % congregando a 3.882.000 telespectadores. Un total de 7.279.000 de personas vieron en algún momento la final del concurso.
La reacción de María Jesús Ruiz al enterarse por boca de Kiko Rivera de que Isabel Pantoja concursará en Supervivientes resumen en segundos lo que muchos han pensado en las últimas semanas, cuando comenzaron los rumores de su fichaje.
Y a su llegada a plató Telecinco hizo lo que mejor sabe hacer: exprimir al máximo la polémica. Hay quienes aseguran que sobrepasó todos los límites y acribilló a María Jesús Ruiz para intentar coronar a Kiko Rivera. Es la eterna queja de concursantes y público desde el principio de los tiempos del reality, que el programa «manipula» los vídeos. María Jesús Ruiz rajó lo más grande durante sus visitas al confesionario, que como recordó Jordi González, «está para usarlo», y Kiko Rivera supo defenderse bien, con frases tan polémicas como la que dedicó a su contrincante: «Yo soy conocido de cuna, tú eres buscada. A mi no me tienes que decir nada».
