Óscar Franco: «La de especialista es una profesión vocacional muy dura»

h. r. REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Una empresa gallega de actores de acción recrea las secuencias más peligrosas de «Serramoura»

24 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Óscar Franco es el coordinador de acción de Galaico Stunt, una empresa gallega de actores de acción que ha participado en la producción de Serramoura, O sabor das margaridas, Fariña, Vivir sin permiso y La sombra de la ley, entre otras.

-¿Qué es Galaico Stunt?

-Galaico Stunt surge por la morriña de vivir en Galicia. Estuve casi diez años trabajando en producciones nacionales e internacionales, había tocado todos los palos y me apetecía empezar algo en Galicia porque no se hacía acción y para la poca que se hacía solía venir gente de fuera. Poco a poco formamos un equipo muy bueno porque en Galicia hay mucho nivel tanto a nivel de pilotos, como luchadores y actores de acción.

-¿Quién forma parte de Galaico Stunt?

-Ahora mismo somos tres coordinadores de acción. Fany Veiga, que también es mi mujer, es muy buena en trabajo de campo y tiene mucho ojo para asignar los roles a los especialistas en función de las necesidades. De las labores de entrenamiento y de asistir a las grabaciones suelo encargarme yo; y Pedro Veiga se suele encargar de la planificación de las secuencias. A mayores tenemos un gran equipo de actores de acción para atender las necesidades que puedan surgir en las producciones.

-¿Ser actor de acción es vocacional?

-Esta es una profesión vocacional porque es muy dura. Tienes que manejar una gran variedad de disciplinas que se requieren, como por ejemplo caídas o artes marciales, tienes que saber conducir todo tipo de vehículos a un nivel muy alto; y tanto mental como físicamente es muy duro y el cuerpo tiene fecha de caducidad.

-¿Se preparan de alguna forma especial?

-En Galaico Stunt por un lado entrenamos las luchas y caídas todas las semanas un par de días como mínimo; por otro está la sección de pilotaje, que entrenamos la parte de conducción, y por último está la sección de los que llevamos toda la vida entrenando en la que preparamos las secuencias que vamos a grabar.

-¿Qué ha sido lo más complicado que han hecho en «Serramoura»?

-En Serramoura realmente no hubo nada complicado de hacer, pero sí que hubo cosas que quedaron muy espectaculares como una quema a lo bonzo, el vuelco de un coche o las caídas. Estoy muy contento, porque al principio nadie se imaginaba que se pudiesen hacer cosas así en Galicia.