Galicia sale esta noche en «Blue Planet 2»

SOCIEDAD

MIGUEL

La mejor serie documental de la historia retrata el fenómeno de la erosión en As Catedrais. El episodio narrado por David Attenborough se emite a las 22 horas en la 2.

12 mar 2019 . Actualizado a las 11:30 h.

Galicia aparece hoy en la mejor serie documental de la historia. En el sexto capítulo de Blue Planet 2, que se emite esta noche a las 22 horas en La 2, As Catedrais o Augas Santas, como se llamaba antiguamente, comparte protagonismo con la Antártida, el Ártico, Galápagos y Nazaré, en Portugal. El episodio Costas, recorre los litorales más espectaculares del planeta para describir los paisajes «más cambiantes del mundo oceánico pero que ofrecen grandes riquezas», tal y como afirma David Attenborough. El famoso naturalista menciona la playa lucense como un ejemplo del trabajo que realiza la erosión. «El poder de las olas va moldeando gradualmente nuestras costas. En algunas zonas de Europa desgastan hasta unos tres metros de litoral cada año. Es un ataque constante que poco a poco va esculpiendo catedrales de piedra, como ocurre en el norte de España», narra. «La erosión marina empezó a trabajar ahí en el último período interglaciar, hace unos 135.000 años, cuando el nivel del mar estaba unos dos metros por encima del actual. Lo que ocurrió es que el mar desgastó la roca a través de la erosión, por el agua que contiene una gran cantidad de cantos rodados que se mueven y que fueron desgastando las rocas poco a poco hasta producir esos agujeros que hay en As Catedrais», explica Ramón Vídal Romaní, catedrático emérito de Geología de la Universidad de A Coruña. La comunidad gallega es de las pocas regiones de Europa que tiene el privilegio de salir en la serie. «Estaba cerca del Reino Unido y nos ofrecía magníficos arcos marinos y esculturas de roca, además de un espectacular rango de mareas. Por esto, Galicia nos proporcionó el lugar perfecto para nuestra secuencia de hiper-lapso de la erosión del litoral», confiesa  Mark Brownlow, productor de la BBC. La mejor forma de ver esta obra maestra es activando en su mando la versión original subtitulada y escuchar al gran Attenborough hablar sobre uno de los  paisajes más impresionantes que la naturaleza ha esculpido en Galicia. 

Un fenómeno global

En el otoño del 2017 Blue Planet 2 reunió en sus siete capítulos a una media de 10 millones, con picos de 14, convirtiéndose en la emisión más vista del año. Mientras, en España 39 de los 50 contenidos más vistos fueron partidos de fútbol. «En Estados Unidos ha sido el programa de naturaleza más seguido en ocho años y en China generó problemas en la conexión de Internet del país tras superarse las 250 millones de descargas», asegura Mark Brownlow, productor de la serie. La segunda temporada llega una década después de la primera. La tecnología moderna ha conseguido más profundidad y una calidad inédita, ofreciendo una perspectiva del océano jamás vista. «Es sorprendente como ha avanzado la tecnología de grabación desde la serie original. El buceo con rebreather les ha dado a nuestros equipos tiempo para sentarse en silencio y mirar, sin burbujas ni disturbios. También es posible descender en un submarino un kilómetro y permancer mil horas, como hemos hecho, o vigilar un arrecife de coral con poca luz», apunta.

Aunque tan importante como la tecnología ha sido la narración de las historias. Los creadores han conseguido trasladar el suspense a la vida marina, grabando escenas propias del mismísimo Hitchcock. Alguno de los protagonistas parece sacado de una película de Almodóvar, como el Kobudai, el pez transexual. Por primera vez, se ha podido captar el sorprendente cambio de sexo que experimenta esta especie que habita en aguas asiáticas. 

Los responsables estuvieron rodando cinco años por todos los mares de la Tierra. Un viaje en el que descubrieron criaturas asombrosas y lugares extraordinarios pero en el que también presenciaron el daño que el ser humano está infligiendo al océano. «Fuimos testigos de dos de los eventos más intensos de blanqueamiento de corales en la historia de la Gran Barrera de Coral en Australia. Y, en casi todas las inmersiones, encontramos plástico», reconoce Brownlow.

 Una respuesta inesperada

La serie retrata las amenazas que se ciernen sobre los mares y sus habitantes. Y lo hace apuntando directamente a la parte sentimental del espectador. Esta es una de las señas de identidad de la producción. «Queríamos que la audiencia forjara una conexión emocional con el océano y entendiera que todos necesitamos un planeta azul saludable para nuestra supervivencia», confiesa. Esa conexión fue real porque lo que vino después nadie lo esperaba. En el Reino Unido hoy se habla abiertamente del efecto Blue Planet. Desde la emisión han surgido numerosas iniciativas de recogida de plástico. Este movimiento medioambiental no deja de crecer e incluso el propio Attenborough ha asegurado sentirse abrumado por el impacto que ha tenido la serie. El informe 2018 sobre consumo de bebida y comida en el Reino Unido refleja que nueve de cada diez personas que la vieron han cambiado su comportamiento. El sesenta por ciento elige ahora botellas de agua recargable.

Dado el éxito que ha tenido Blue Planet 2, la BBC ya ha anunciado que en los próximos años estrenará cinco series sobre la vida y la Tierra. Nuevas producciones en las que la tecnología y las historias se darán de la mano para seguir inspirando al mundo entero.