La Organización de Consumidores y Usuarios alerta de que productos como los confiscados en Portugal son «especialmente peligrosos y no se deben comprar». Aunque asegura que se han adquirido en páginas web portuguesas, no descarta que se puedan encontrar en España. «En concreto -afirma Enrique García, su portavoz- el Redux es una combinación de dos antidepresivos, dos diuréticos y la sibutramina, un medicamento para tratar la obesidad que fue retirado por tener un alto riesgo cardiovascular». García alerta de que el consumo de este tipo de compuestos pone en riesgo la salud y asegura que «lo mejor que te puede pasar si los tomas es que no te hagan nada».
El año pasado la OCU denunció 23 marcas por publicidad y etiquetado ilegales. Fue el resultado de un estudio en el que analizó el catálogo de productos existentes en el mercado que prometen adelgazar «pero no tienen ningún tipo de garantías».
La organización asegura que la norma que regula la publicidad de este tipo de suplementos no se cumple en muchos casos. El principal motivo de la denuncia fue la publicidad engañosa, ya que muchos de estos productos utilizaban reclamos que sugerían supuestas propiedades adelgazantes como «reduce», «vientre plano» o «ayuda a controlar tu peso», cuando está prohibido específicamente por ley.
Además, el estudio analizó las consultas de dietética de las farmacias, herbolarios, tiendas de fitness y centros para adelgazar. En muchos de ellos comprobaron que los supuestos profesionales no hacían ningún comentario al respecto cuando los usuarios claramente no necesitaban perder peso. Algunos, incluso, les ofrecían directamente productos adelgazantes.