Todos los detalles del vestido de novia de Marta Ortega

La Voz

SOCIEDAD

El look fue diseñado exclusivamente para ella por Pierpaolo Piccioli, el director creativo de Valentino

17 nov 2018 . Actualizado a las 09:37 h.

Marta Ortega y Carlos Torretta ya son marido y mujer. En una ceremonia de carácter estrictamente reservada para su círculo más cercano y celebrada en la casa que la familia tiene en O Parrote (A Coruña), los novios se han dado el sí quiero.

Han trascendido algunos detalles sobre la ceremonia celebrada esta mañana en O Parrote. Según informa Sofía Vázquez, Amancio se emocionó al recibir a su hija Marta Ortega al inicio del enlace, que se celebró en un patio cerrado situado en la parte baja de la casa que la familia utiliza de salón. La boda estuvo amenizada por una cantante. 

Cuando la novia llegó, Carlos Torretta le dio un beso, un gesto de cariño que los novios repitieron al terminar la boda. 

Durante el convite se sirvieron varios platos entre los que hubo croquetas, jamón, carneiro (una especie de bivalvo) y merluza del pincho de Celeiro.

Tras el enlace, la pareja ha mandado un sentido mensaje de cariño para todos los allegados: «Marta y Carlos, felices por su boda, agradecen las muestras de cariño recibidas».

Marta Ortega vestía un look diseñado exclusivamente para ella por Pierpaolo Piccioli para la firma Valentino Haute Couture. Así ha descrito Pierpaolo Piccioli, director creativo de Valentino, su trabajo para la novia: «Acompañar a una mujer en uno de los momentos más importantes de su vida siempre es un regalo para mí. A través de este diseño he querido transmitir un imaginario con un inusual sentido de romanticismo, lleno de ligereza, frescura e intención para ilustrar su fuerte personalidad». 

«Un sofisticado rosa claro casi blanco fue el color elegido para el vestido. Quería que fuera ligero como un aura que irradia las emociones de la novia, no solo un vestido, sino algo más vinculado a la magia del momento, al igual que el velo y las pequeñas flores sobre el peinado de la novia. La camisa de gasa plisada y la falda hablan un lenguaje más contemporáneo y, al mismo tiempo, romántico», son las palabras con las que el diseñador desgrana los detalles del vestido. 

Explica Piccioli que el diseño de alta costura trata «sobre la singularidad, la intimidad, la individualidad y los sentimientos atemporales». «Este lenguaje me dio la oportunidad y el honor de vestir a Marta Ortega en un momento tan especial; espero que disfrute de esta creación tanto como yo disfruté de concebirla para ella».

El diseño de Valentino se llevó todo el protagonismo del look. Marta Ortega no quiso eclipsar el vestido de boda y como únicas joyas llevó su anillo de pedida y unos sencillos pendientes de color rosa. La tradición de llevar algo azul la cumplió con una pulsera de un sencillo hilo azul. El ramo es obra del florista francés Thierry Boutemy que se inspiró en su composición en los colores de la naturaleza gallega. Discreto y rico al mismo tiempo, es más un ejercicio vegetal que floral, y ha sido específicamente pensado para que se adaptara perfectamente al diseño de Pierpaolo Piccioli. Boutemy aseguraba que el concepto del ramo «es una referencia a Marta, a su sensibilidad natural y su conexión con la naturaleza». El calzado de la novia era un salón escotado de piel en el mismo tono que el vestido. Carlos Torretta vistió un traje clásico en color azul confeccionado a medida en una sastrería de Savile Row. 

Las fotos oficiales de la boda de Marta Ortega y Carlos Torretta distribuidas a los medios de comunicación corrieron a cargo del alemán Peter Lindbergh, uno de los fotógrafos más conocidos en el mundillo de las celebrities.

La madre y la hermana del novio, Carmen Echevarría y María Torretta, vestían creaciones de Roberto Torretta. Massimo Dutti se encargó de vestir a los niños presentes en la ceremonia y a los testigos por parte de la novia.

El cóctel

Dos chefs españoles se encargaron de la parte gastronómica del cóctel. El gallego Javier Olleros de Culler de Pau y Ricardo Sanz, de Kabuki. En sus propuestas para esta ocasión destaca el protagonismo de los vinos blancos gallegos. El ambiente musical estará a cargo de tres grupos de jóvenes artistas: The Bluebirds, Watermat y Sam French.

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