Al menos veinte expedientes
El último paso es abrir un expediente sancionador, algo que solo ocurrió con 20 locales. Pero, tal y como indican desde Saúde Pública, esta cifra de 20 expedientes puede crecer, porque los inspectores tienen meses para abrir estos procesos y no tienen por qué hacerlo al instante. Sí se abre inmediatamente cuando se ha suspendido de forma cautelar el local afectado.
En cuanto a las multas, si las infracciones son calificadas como leves pueden llegar a los 3.000 euros; a 15.000 en el caso de las graves; y por encima de esa cantidad si están catalogadas como muy graves. Si el propietario reconoce la deficiencia y realiza un pago en un plazo establecido, esta multa puede reducirse un 40 %. Las visitas se hacen tanto en establecimientos de restauración sin comedor, por ejemplo bares o cafeterías, como en los que sí lo tienen. El 44 % se realizaron en locales del primer tipo; otro 45 % en centros con comedor; y el 11 % restante en establecimientos de restauración social como los de los hospitales, residencias o colegios.