El programa, que incorpora a Portugal, aumenta la compatibilidad entre donante y receptor
06 nov 2019 . Actualizado a las 17:14 h.Ninguna de las dos parejas se conocía. Estaban separadas por mil kilómetros de distancia. Pero ahora están unidas por un riñón. No fue un cruce al azar. El algoritmo matemático de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) identificó que un donante de Pisa (Italia) era compatible con un receptor de Barcelona. Y viceversa. Ocho semanas después se completó una exitosa intervención que se ha convertido en el primer trasplante renal cruzado internacional realizado en el sur de Europa.
En otras circunstancias no hubiera sido posible el trasplante, ya que el riñón del donante de Barcelona era incompatible con el de su pareja, como también lo era en el caso de la de Pisa. Cruzar sus historias y sus órganos para concluir en una historia con final feliz fue posible gracias al programa que coordina desde España la ONT y al que desde el pasado mes de enero se han sumado Italia y Portugal. En la iniciativa participan desde entonces diez hospitales españoles, tres italianos y un portugués, que han involucrado hasta el momento a 113 parejas donante-receptor en busca de una compatibilidad que ahora se les niega. De ellas, 79 son españolas, 19 portuguesas y 15 italianas.
Hasta el momento solo se habían efectuado en el mundo operaciones semejantes de trasplante internacional de riñón cruzado entre Austria y la República Checa y entre Estados Unidos y Canadá. Pero fueron casos aislados y en ningún caso se hicieron al amparo de un plan coordinado y con vocación de futuro, como ha ocurrido ahora.
«Lo importante en nuestro caso es que la intervención se ha realizado en el seno de un programa muy estructurado, muy sólido, supervisado y gestionado con otras organizaciones de trasplantes, y con muchos visos de continuidad en el futuro», explica Beatriz Domínguez Gil, la directora de la ONT.
La primera combinación exitosa, en este caso entre Barcelona y Pisa, es solo el principio. La ampliación del número de parejas de donante-receptor en los tres países permitirá aumentar la compatibilidad de los órganos y ofrecer una nueva alternativa para que los pacientes con insuficiencia renal crónica puedan lograr un trasplante.
En menos de ocho horas
Este tipo de intervenciones conllevan un complicado proceso logístico, que se complica aún más con su internacionalización, ya que se requiere de una total colaboración entre las oficinas centrales de las organizaciones nacionales de trasplantes de los tres países implicados, de los coordinadores autonómicos y de los equipos médicos de los hospitales. En el caso del practicado entre Barcelona, que se llevó a cabo en la Fundación Puigvert, y Pisa, en el Ospedale Cisanello, un avión trasladó el órgano desde la ciudad italiana a la catalana y se llevó de vuelta el del donante español. Todo el proceso se realizó en menos de ocho horas.
El programa de trasplante renal cruzado de donante vivo se inició en España en el 2009. Desde entonces se han iniciado 194 intervenciones de este tipo. Y ahora también se exporta.
