Boticas gallegas inician un plan para que los usuarios tomen mejor sus fármacos

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

MARCOS MÍGUEZ

Revisarán los tratamientos de casi 200 crónicos en el programa AdherenciaMED

01 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Quince boticas del Colegio Oficial de Farmacéuticos de A Coruña participan en un programa que ha puesto en marcha el Consejo General de Colegios para mejorar la adherencia de los enfermos crónicos a sus tratamientos. En toda España participan 92 farmacias y en la comunidad gallega está previsto llegar en esta fase a casi 200 usuarios.

Se trata de personas que tienen hipertensión arterial, EPOC y asma, tres de las enfermedades en las que más descontrol se percibe al seguir el tratamiento. Desde las boticas se revisan todos los medicamentos que toman los pacientes que aceptan participar voluntariamente; se les pregunta qué pautas siguen; y se les aconseja en caso de que estén realizando algo mal. Fina Castro, de la farmacia Briones de A Coruña, es una de las farmacéuticas participantes en el programa, cuyos primeros resultados se darán a conocer en octubre, «después de que acepten participar y den su consentimiento informado se les cita un día para que traigan toda la medicación, tanto la que les dio el médico como la que toman por su cuenta e incluso los productos naturales», explica.

El objetivo de analizar todo el arsenal terapéutico y de hacer entrevistas en profundidad con los pacientes es que a veces hay interferencias entre unos fármacos y otros, e incluso con productos que no son fármacos. «Por ejemplo, el zumo de pomelo interfiere con muchos medicamentos», explica Castro Leis.

En la primera entrevista también se pregunta al enfermo qué aspectos de su salud le preocupan más. Y es que a veces hay síntomas que perciben los usuarios que están relacionados con una enfermedad, pero que ellos no asocian. En el caso de aquellos que padecen asma o EPOC, por ejemplo, «se sienten preocupados por el cansancio, pero no se dan cuenta de que es por la falta de oxígeno, por lo que preguntamos si toman bien la medicación y en las horas en las que deben hacerlo...», explica la farmacéutica de A Coruña.

Realizada la entrevista y el análisis de los tratamientos, y una vez que se ha comprobado que no hay medicamentos duplicados o que entren en interacción entre ellos, los participantes en el programa acuden mensualmente a la farmacia para medir indicadores como la hipertensión en el caso de que tengan esta enfermedad, o comprobar como usan los inhaladores si tienen problemas de asma o EPOC. En el caso de que el enfermo sufra algún agravamiento «vienen por aquí y lo comentan», apunta Fina.

Los primeros resultados de este proyecto se conocerán en octubre, pero ya se han comprobado algunos de los efectos positivos con los pacientes implicados. Los casos más significativos son los de los enfermos pulmonares, «gente que no podía subir las escaleras de casa porque se fatigaban, y ahora dicen que ya pueden hacerlo», señala Leis. Y es que muchas veces confundían los inhaladores de tratamiento y los de rescate, por lo que no seguían las pautas adecuadas. También han visto cómo se reducían los fármacos que tomaban algunos pacientes, «porque nos encontramos usuarios que tomaban varios medicamentos para el mismo problema».

Los usuarios del programa son normalmente mayores y con enfermedades crónicas, ya que los pacientes más jóvenes «son más ágiles» a la hora de seguir las indicaciones de adherencia, por lo que no necesitan un seguimiento tan cercano.

Sonia Carreira, coordinadora del programa en el colegio de A Coruña, asegura que el objetivo de esta iniciativa «es demostrar con una evidencia científica que este seguimiento tiene un impacto real en la salud de los pacientes». Para ello, a partir del 31 de octubre se hará un tratamiento estadístico de los datos del programa. Y si los resultados son positivos el fin último es que esta práctica se incorpore a la rutina diaria de los farmacéuticos, siempre en colaboración con el sistema sanitario.

De hecho, el presidente de los farmacéuticos de A Coruña, Héctor Castro, se reunió hace unas semanas con médicos de atención primaria para hacerles partícipes de un programa cuyo principal beneficiario es el paciente gallego.